LO ESENCIAL
- El estrés experimentado durante la infancia puede afectar el epigenoma de los espermatozoides y transmitirse a generaciones futuras.
- La herencia epigenética es el impacto de la experiencia de una generación en la epigenética de la siguiente.
- Los investigadores han descubierto dos pruebas de esta herencia epigenética en hombres que experimentaron un trauma infantil.
El estrés que experimenta un niño afecta la calidad de su esperma una vez que es adulto, según un nuevo estudio publicado en la revista Psiquiatría molecular. Según investigadores de la Universidad de Turkuen Finlandia, en colaboración con los de la Universidad de CopenhagueEn Dinamarca, esto podría tener consecuencias para el desarrollo cerebral de la próxima generación.
El estrés experimentado durante la infancia afecta a los espermatozoides
Antes de esta investigación, el equipo de la Universidad de Turku trabajó en la cohorte del estudio FinnBrain, en la que participaron 55 hombres. Descubrió una asociación entre la exposición al estrés paterno en una etapa temprana de la vida y el desarrollo del cerebro infantil. En otros trabajos, también se ha demostrado que el maltrato infantil está asociado con varias características epigenéticas de los espermatozoides, que podrían tener efectos en el desarrollo cerebral de los niños. yoInstituto Nacional de Salud e Investigación Médica (Inserm) define la epigenética como cambios en la actividad de los genes (activándolos o inhibiéndolos), que no implican modificación de la secuencia del ADN. Estas modificaciones pueden transmitirse durante la división celular.
Tras estos avances, los científicos querían encontrar pruebas de herencia epigenética. Es decir, el impacto de la experiencia de una generación en la siguiente. Para ello, se hicieron cargo de la cohorte del estudio FinnBrain. “Este estudio es el más grande y completo jamás realizado en humanos”, explica la profesora Noora Kotaja, autora principal del nuevo estudio, en un comunicado de prensa.
Evidencia de la herencia epigenética del estrés.
Durante sus nuevos análisis, los investigadores observaron la metilación del ADN, que es “uno de los métodos que utiliza el epigenoma para activar o inhibir genes, como se define en este artículo geografía nacional. La metilación del ADN generalmente agrega un marcador químico al ADN; la desmetilación lo elimina”.
Así, los científicos descubrieron dos pruebas de herencia epigenética en hombres que experimentaron un trauma durante su infancia:
- niveles más bajos de metilación del ADN del esperma en tres regiones del ADN;
- alteraciones en la expresión de determinadas moléculas de ARN no codificantes.
Ambos cambios están asociados con el desarrollo del cerebro de la descendencia.
Los resultados apoyan la hipótesis de los investigadores: el estrés experimentado por una generación puede transmitirse a las siguientes, a través de epigenética. Pero, por el momento, no constituyen una prueba científica. Será necesario realizar más pruebas para demostrar la herencia del trauma.