Ahora que África está cambiando la tendencia del VIH/SIDA y que la mayoría de las nuevas infecciones por VIH ocurren fuera del continente, la búsqueda de una cura está en marcha, dice el profesor Thumbi Ndung’u, experto internacional en VIH/SIDA y director de Ciencias Básicas y Traslacionales de la el Instituto Africano de Investigación en Salud (AHRI) en KwaZulu-Natal.
El Día Mundial del SIDA se celebra anualmente el 1 de diciembre desde 1988, para recordar a la sociedad la necesidad de solidaridad global en la lucha actual contra el VIH/SIDA.
“Hemos logrado enormes avances. Existen métodos muy eficaces de prevención y tratamiento del VIH, pero casi 40 millones de personas en todo el mundo viven con el VIH y no es fácil. La mayoría de estas personas viven en África. Necesitamos nuevas soluciones”, afirma Ndung’u.
Una de estas nuevas soluciones es una vacuna contra el VIH y la otra, una cura. Estos nuevos enfoques de la pandemia muestran que, si bien los medicamentos antirretrovirales (ARV) han sido extremadamente eficaces para prevenir la transmisión del VIH de persona a persona y prolongar la vida de las personas VIH positivas, su uso a largo plazo es oneroso y costoso. Las personas que viven con el VIH, incluso cuando reciben terapia antirretroviral, también tienden a tener una mayor incidencia de comorbilidades como trastornos metabólicos y cáncer en comparación con las personas sin infección por el VIH.
En Sudáfrica, el sistema de salud pública proporciona terapia ARV de forma gratuita desde 2004. El tratamiento ARV es el principal factor detrás de la estimación de ONUSIDA de que el número de nuevas infecciones por VIH en Sudáfrica ha disminuido en un 50% entre 2010 y 2021.
A nivel mundial, las nuevas infecciones por VIH han disminuido un 60% desde su pico en 1995, según ONUSIDA, y Ndung’u dice que alrededor de 26 millones de los casi 40 millones de personas infectadas con VIH en el mundo viven en África.
El tercer Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, que apunta a lograr buena salud y bienestar en todo el mundo para 2030, pretende poner fin a la pandemia del VIH/SIDA para ese mismo año. Este objetivo se alcanzará si el número de nuevas infecciones por el VIH y de muertes relacionadas con el SIDA disminuye en un 90% entre 2010 y 2030. Los ODS son un conjunto de 17 objetivos que, si se logran, apuntan a garantizar “la paz y la prosperidad para las personas y el mundo”. planeta.”
Según Ndung’u, los investigadores están buscando una cura para el VIH que pueda ayudar a erradicar el SIDA y controlar la propagación del virus. Sin embargo, décadas de investigación sobre una vacuna contra el virus han demostrado que encontrar soluciones inmunes contra el virus no es sencillo.
“Solíamos decir que estaba a punto de desarrollarse una vacuna”, afirma. Pero es difícil predecir cuándo podremos desarrollar uno. Dicho esto, hace 30 años muchos se habrían mostrado escépticos sobre la eficacia de nuestros medicamentos. »
También es difícil encontrar una cura. Sólo siete personas en todo el mundo se han curado del VIH, todas tras recibir un trasplante de médula ósea tras desarrollar cáncer. Pero el trasplante de médula ósea es un procedimiento radical, costoso y a menudo peligroso.
Ndung’u participa en un ensayo de tratamiento en el que participan mujeres jóvenes de KwaZulu-Natal, una de las poblaciones más vulnerables a la infección por VIH en Sudáfrica.
El estudio está en curso, pero Ndung’u tiene esperanzas. Como parte de este estudio, AHRI está tratando a mujeres con ARV muy temprano después de contraer el virus del VIH. Esta medida preserva su sistema inmunológico. Luego, las mujeres reciben poderosas intervenciones de refuerzo inmunológico que pueden matar directamente al VIH y despertar las células inmunes donde se esconde el virus cuando la persona toma medicamentos antirretrovirales.
“Esperamos que esta estrategia permita el control del virus a largo plazo en ausencia de ARV y que también podamos comprender mejor los mecanismos que pueden controlar el virus en los participantes del estudio sin tratamiento antirretroviral. Esto sería un avance importante y, con el tiempo, podría llevarnos a una cura”, afirma Ndung’u.
Es esencial que continúen las investigaciones sobre el VIH/SIDA en África porque, aunque la incidencia de la infección por el VIH está disminuyendo, la situación podría cambiar en cualquier momento, afirma Ndung’u. Para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible sobre el VIH/SIDA, África debe reducir significativamente su tasa de infección.
También en África, el VIH es una enfermedad que afecta principalmente a las mujeres jóvenes, mientras que en las regiones donde la infección por el VIH está aumentando (Asia, América Latina y Europa del Este) la infección afecta con mayor frecuencia a los hombres.
“Debemos seguir investigando, de lo contrario nunca haremos descubrimientos. La investigación nos da una oportunidad”, afirma.