La ansiedad escénica también puede manifestarse como ansiedad o ataques de pánico en determinadas circunstancias. También suelen asociarse trastornos somáticos, como migrañas, trastornos digestivos, tensión muscular, aumento de la presión arterial, insomnio, etc.
¿Cuáles son las causas de este trastorno?
Varios factores pueden explicar y promover esta ansiedad por el desempeño. En primer lugar, algunos de nosotros sufrimos de baja autoestima. También puede entrar en juego una tendencia a la ansiedad. El perfeccionismo también entra en la ecuación. Se trata de la “tendencia a imponer exigencias excesivas al rendimiento que va acompañada de una autoevaluación demasiado crítica”, precisa la Universidad de Sherbrooke. Sin embargo, “la perfección no existe”, recuerda Sophie Maretto, psicóloga en París.
Y esta búsqueda de la perfección está “acentuada por la sociedad del ego en la que evolucionamos y que se ve favorecida por los gustos y los corazones de las redes sociales, que se interpretan como una evaluación de nuestro valor como individuos”, continúa. La comparación constante promueve la ansiedad por el desempeño en todas las áreas.
¿Cómo combatir la ansiedad por el desempeño?
“Es importante felicitarse, tranquilizarse y ser amable con uno mismo”, aconseja Sophie Maretto. Para aceptar que no podemos alcanzar la perfección, debemos “aceptar nuestras fragilidades, hacer las paces con nuestra historia y perdonarnos a nosotros mismos”, continúa. Se trata, en efecto, de “ser indulgentes con nosotros mismos, porque no somos robots”, añade.
Pero por supuesto, ante una situación de alta ansiedad, puede ser útil buscar ayuda de un psicólogo.
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