¿Qué pasa si una infección tan grave como En última instancia, la sepsis podría proteger al paciente contra el desarrollo del cáncer. ? Ésta es la inesperada hipótesis sugerida por los investigadores franceses del Inserm. Concéntrese en las conclusiones de su nuevo estudio.
¿Qué es la sepsis?
La La sepsis se refiere a la inflamación generalizada.y masivo, provocando una disfunción en el organismo que puede ser mortal. Suele estar asociado a una infección bacteriana o viral grave como la gripe o el Covid-19.
¡Para saber! 57.000 personas mueren cada año por sepsis en Francia.
Si bien los estados inflamatorios están bastante documentados en la literatura científica como factores de riesgo de cáncer, investigadores franceses sugieren, sin embargo, en un nuevo estudio que los pacientes que sobreviven a la sepsis podrían ser protegido contra el desarrollo de tumores .
Sepsis: ¿protección contra el cáncer?
Para realizar su trabajo, los investigadores se basaron en datos de salud de más de 110.000 franceses hospitalizados entre 2010 y 2016. En este panel:
- El 50% de los pacientes sufrieron sepsis.
- El 50% de los pacientes con una infección menos grave.
Luego, los investigadores observaron que para factores de riesgo equivalentes (edad, sexo, obesidad, etc.), la Los pacientes con sepsis tenían una reducción promedio del 12,5% en el riesgo de desarrollar cáncer. ¡en comparación con pacientes que padecen una infección menos grave!
Ante esta sorprendente correlación, el objetivo de los científicos era demostrar si existía un vínculo real entre la aparición de un episodio de sepsis y un posible efecto protector contra el cáncer en estos pacientes. Así, se han llevado a cabo varios estudios de biología celular y molecular en animales para comprender los mecanismos implicados en este inesperado efecto protector.
En particular, pudieron observar que en ratones que padecían sepsis, ciertas células inmunitarias llamadas macrófagos estaban “entrenadas” para reaccionar rápidamente ante una nueva infección. Luego, estas células producen pequeñas proteínas llamadas quimiocinas responsables de atraer y retener otras células inmunes (células T residentes) en los órganos afectados. Y, sorprendentemente, estas células inmunitarias persisten en los tejidos afectados durante varias semanas o meses después de la recuperación de la sepsis.
Según el autor principal de este estudio, la presencia persistente de macrófagos y células T residentes persistentes contribuiría así a aumentar la vigilancia inmune antitumoral y promover una respuesta más rápida y eficaz en caso de desarrollo de cáncer.
¿Cómo podemos imitar los efectos “protectores” de la sepsis?
Por tanto, al equipo de investigadores le pareció interesante intentar reproducir farmacológicamente esta inmunidad inducida por la sepsis. Para ello utilizaron “betaglucano” que inyectaron en una población de ratones.
¡Para saber! Procedente de la levadura de cerveza, el “betaglucano” se refiere a una fibra soluble conocida por su capacidad para activar los macrófagos.
Tras esta inyección, los macrófagos de los ratones pudieron reaccionar rápidamente y permitir el reclutamiento de células T residentes, exactamente como después de la sepsis. De ahí la idea de aplicar este principio a los humanos. El único inconveniente es que actualmente la fibra de betaglucano no está suficientemente purificada y, por tanto, presenta un riesgo potencial para la salud humana. De ahí la necesidad de que los investigadores identifiquen la parte activa mínima esencial para la actividad estimulante de los macrófagos del betaglucano para poder utilizarlo en humanos.
Si aún es necesario avanzar en la investigación sobre el tema, los autores de este estudio publicado en la excelente revista científica internacional Inmunología de la naturaleza Tienen la esperanza de que su trabajo algún día pueda conducir al desarrollo de estrategias terapéuticas destinadas a prevenir y tratar el cáncer.
Fuentes
– Las propiedades anticancerígenas de la sepsis. . www.lequotidiendupharmacien.fr. Consultado el 26 de octubre de 2024.
– Infecciones graves: ¿un escudo contra el cáncer? . www.inserm.fr. Consultado el 26 de octubre de 2024.
Escrito por Déborah L.