Cómo apoyar a los empleados con cáncer de mama.

Cómo apoyar a los empleados con cáncer de mama.
Cómo apoyar a los empleados con cáncer de mama.
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Con motivo del Octubre Rosa, el mes de sensibilización sobre la detección del cáncer de mama, las empresas también tienen su papel que desempeñar. Ya sea en el apoyo a los empleados o en la comunicación en torno a las pruebas de detección, se trata de un cáncer que, aunque se trate bien, afecta cada año a 60.000 mujeres y 600 hombres.

Informarle a su empleador sobre el cáncer de mama puede ser una tarea delicada. Existe el miedo a ser “colocado”, el miedo a los rumores sobre uno mismo o incluso las dudas sobre el mantenimiento de las propias capacidades en el trabajo. Para la empleada en cuestión, se trata de un doble golpe, especialmente en la fase de diagnóstico, cuando tiene que compatibilizar las citas profesionales y médicas.

Sin embargo, la abogada especialista en derecho social, Pauline Tannai, es categórica: la cita médica es suficiente para justificar las ausencias, no tiene sentido sentirse obligado a especificar sus problemas de salud a su empleador. ¿Y cuando se hace el diagnóstico? No existe una regla particular para comunicárselo a su gerente. En el plató de BFM Business Avec Vous, el abogado es categórico:

“La empleada sólo debe decir que está enferma, pero no es necesario entrar en detalles”.

Benoit Serre, vicepresidente adjunto de la asociación nacional de responsables de recursos humanos, cree que es importante comunicarse con su empleador. Sin embargo, no debemos olvidar que “el paciente sigue siendo dueño de su enfermedad”. Según el profesional de recursos humanos, es en este tipo de situaciones donde el “vínculo directivo” adquiere toda su importancia, porque es necesario garantizar “que el interesado se sienta libre de decir o no decir lo que ha llegado”.

Apoyar a los empleados durante la enfermedad.

Para Benoit Serre, la empresa debe desempeñar un papel de apoyo a sus empleados enfermos y puede, cuando la actividad lo permita, ofrecer adaptaciones laborales. La comunicación es la clave, asegura la abogada Pauline Tannai, y cuando es complicada, “la intervención del médico del trabajo puede permitir obtener adaptaciones en las posiciones terapéuticas”. Resultado: la empleada puede continuar con su trabajo y el empleador puede gestionar su actividad lo mejor posible.

Virgilia Hess, periodista meteorológica de BFMTV, fue diagnosticada con cáncer de mama a los 32 años mientras estaba embarazada. “Lo que sí podría aconsejar es delegar en la medida de lo posible el anuncio de su enfermedad”, afirma el periodista. En su caso, un colega informó a su dirección de su problema de salud, dándole tiempo para digerir la información por sí solo.

“Conocer el cáncer es como un verdadero golpe en la cabeza”.

Virgilia Hess escribió entonces a su dirección por correo electrónico: “Preferí decir que iba a ser largo, para no tener que preocuparme por cuestiones de agenda. Fue bastante útil, porque mi ausencia duró un año”.

Trabajar de noche, un agravante

Se ha reconocido que el trabajo nocturno representa un riesgo adicional de desarrollar cáncer de mama. Un estudio del Inserm destaca un 30% más de peligro para las mujeres que trabajan en horarios escalonados. Pero demostrar un vínculo directo entre las horas nocturnas y las enfermedades no es sencillo. Jean-Luc Rue, responsable de proyectos de salud laboral del CFDT Grand Est, explica que se trata de una lucha muy larga. El sindicalista indica que para los empleados hay mucho papeleo y los plazos para el reconocimiento de la enfermedad profesional son bastante largos.

Lo más difícil es “probar la relación directa entre trabajo y enfermedad y corresponde al trabajador aportar las pruebas”, según Jean-Luc Rue.

Virgilia Hess trabajó durante cinco años en horarios impares, “todos los días se despertaba a la 1 de la madrugada”, pero su cáncer de mama no fue reconocido como enfermedad profesional. Sin embargo, su oncólogo expresó dudas: “un cáncer tan joven, con 32 años, sin antecedentes familiares, plantea interrogantes”.

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No podemos detener el progreso: Octubre Rosa, innovaciones para luchar mejor contra el cáncer de mama – 10/14

Entonces, ¿podemos renunciar a los turnos de noche para limitar los riesgos para nuestra salud? Según la abogada Pauline Tannai, hay dos situaciones muy distintas. Si la empleada no trabaja previamente en turnos de noche, entonces puede rechazarlos, porque en este caso “se trata de una modificación del contrato de trabajo”. En cambio, si el empleado ya trabajaba de noche, “es más complicado negarse, porque el escalonamiento de horarios está realmente contractualizado”.

La intervención del médico del trabajo es fundamental ante una negativa, porque puede “expresar reservas” sobre el mantenimiento de horarios escalonados. Recomendaciones médicas, que el empresario está obligado a tener en cuenta.

¿Qué pasa con el regreso al trabajo?

“Para mi regreso a BFM, el médico del trabajo se hizo cargo de mí. Mi organización me creó un puesto de trabajo diurno que no existía”, testifica el periodista meteorológico. Virgilia Hess obtuvo terapia a tiempo parcial:

“No había terminado mi tratamiento, e incluso cuando termina la quimioterapia, todavía queda la terapia hormonal que dura varios años”.

Lo que la marcó fue la aprensión antes de volver al trabajo: el miedo a no rendir lo suficientemente bien, a no tener la misma energía. Anabelle Brouhrant, cofundadora de la asociación Hope, que apoya a las mujeres con cáncer, lo tiene claro: cuando enfermas, te quedas en casa y te aíslas rápidamente.

“Muchas mujeres necesitan apoyo cuando regresan al trabajo; después de la soledad de la enfermedad, necesitan recuperar la confianza en sí mismas”.

Virgilia Hess resultó herida, en su regreso al trabajo, cuando le dijeron: “lo más difícil ya pasó, está bien, ya quedó atrás”. Evidentemente, explica Anabelle Brouhrant, nunca se sabe qué decirle a un colega que regresa, “salvo intentar ser lo más natural posible”.

Diálogo con su empleador

“Siempre encontramos soluciones”, asegura el especialista en recursos humanos Benoit Serre. Ya sea para organizar el trabajo o anunciar el regreso a la empresa, “nuestra función es apoyar mejor al empleado que regresa”. Sobre todo porque una ley de 2021 permite mantener reuniones entre el empleado y su empleador. Denominadas “reuniones de enlace”, pueden ser solicitadas tanto por el empleado en excedencia como a propuesta del gerente.

El cáncer de mama sigue siendo cada año la principal causa de muerte entre las mujeres, pero es una enfermedad que también afecta a los hombres. Sin embargo, uno de cada tres franceses no se siente preocupado por la enfermedad, según una encuesta de Ifop para Florajet. Una cifra alarmante que demuestra la importancia de la campaña de sensibilización sobre las pruebas de detección con motivo del Octubre Rosa. Debido a que se detecta a tiempo, el cáncer de mama se cura en nueve de cada diez casos.

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