En diciembre de 2023, un equipo de investigadores australianos publicó un análisis innovador en el Boletín de esquizofrenia. Este estudio desafía nuestra percepción de los gatos domésticos, sugiriendo un vínculo potencial entre su presencia en el hogar y un mayor riesgo de desarrollar trastornos esquizofrénicos. Aunque este descubrimiento plantea muchas preguntas, también abre nuevas perspectivas sobre los factores ambientales que pueden influir en nuestra salud mental.
A pesar de su apariencia altiva, el gato está más apegado a sus humanos de lo que parece. Siga la historia de su evolución junto a nosotros en Bêtes de Science. © Futura
El parásito Toxoplasma gondii: un sospechoso inesperado
En el centro de este enigma está Toxoplasma gondiiy parásitoparásito microscópico a menudo asociado con los gatos. Este microorganismo, generalmente inofensivo para la mayoría de las personas, podría desempeñar un papel insospechado en el desarrollo de trastornos mentales. Aquí hay algunos puntos clave para recordar:
- tt. gondii puede transmitirse a través de carne poco cocida, agua contaminada o contacto con gatos infectados;
- Se cree que aproximadamente 40 millones de estadounidenses son portadores del parásito, a menudo sin síntomas;
- Una vez en el cuerpo, T. gondii puede infiltrarse en el sistema nervioso central e influir en los neurotransmisores.
Dr. John McGrath y su equipo en Centro de Queensland para la investigación en salud mental analizó estudios realizados desde 1995, cuando se propuso por primera vez la hipótesis de un vínculo entre los gatos y la esquizofrenia. Sus resultados sugieren que las personas expuestas a gatos tienen aproximadamente el doble de probabilidades de desarrollar trastornos esquizofrénicos.
¿Tener un gato podría influir en la esquizofrenia? Hallazgos sorprendentes según un estudio. © Irina Belova, iStock
Una relación compleja entre los felinos y la salud mental
El estudio australiano destaca luzluz una correlación intrigante, pero es esencial señalar que correlación no implica causalidad. Los investigadores destacan varios puntos importantes:
Aspecto | Observación |
Calidad de los estudios | Variado, con algo de baja calidad. |
Consistencia de resultados | Inconsistente entre diferentes estudios |
Período crítico de exposición | Mal definido, potencialmente entre 9 y 12 años. |
Un estudio estadounidense en el que participaron 354 estudiantes de psicología no encontró ningún vínculo directo entre tener un gato y las puntuaciones de esquizotipia. Sin embargo, descubrió que las personas que habían sido mordidas por un gato tenían puntuaciones más altas en algunas escalas psicológicas.
Más allá del Toxoplasma, otras vías por explorar
si, si T. gondii sigue siendo el principal sospechoso, otros factores podrían explicar esta misteriosa asociación. Los investigadores han sugerido que otros patógenos, como Pasteurella multocidatambién podría desempeñar un papel. Esta bacteria, presente en el salivasaliva los gatos, podrían influir en ciertos aspectos de nuestra psicología.
Es fundamental subrayar que este descubrimiento no debería generar un pánico injustificado. Los autores del estudio piden precaución e investigación adicional de alta calidad. Ellos recomiendan:
- Estudios basados en grandes muestras representativas.
- Una mejor comprensión de los posibles mecanismos en juego.
- Explorar otros factores ambientales que pueden influir en la salud mental.
Este fascinante estudio abre nuevas perspectivas sobre las complejas interacciones entre nuestro entorno, nuestros compañeros animales y nuestra salud mental. Aunque muchas preguntas siguen sin respuesta, destaca la importancia de continuar la investigación en esta intrigante área de la ciencia médica.