Hoy ha sido inaugurada la Escuela Internacional de Actores y Actrices de Dakar (Eiad), marcando el regreso a Senegal de su fundador, Adama Diop. Adama Diop, que abandonó el país hace más de 20 años para perfeccionar su arte, desea ahora contribuir al desarrollo cultural de su país de origen.
“Es un proyecto en el que he estado pensando durante mucho tiempo”, explicó. Adama Diop, que empezó en el teatro en los años 2000, continuó su formación en Francia antes de concebir este ambicioso proyecto. “Quería crear un lugar para Senegal y el continente africano”, añadió, destacando la importancia de un enfoque panafricano y unido.
La idea de Eiad nació del deseo de revitalizar el teatro senegalés y formar una nueva generación capaz de evolucionar hacia los estándares internacionales. La escuela ofrece una formación polivalente que incluye cine, audiovisual y teatro, para que los actores puedan adaptarse a los diferentes medios.
Adama Diop también quiere que la escuela proporcione formación para otras profesiones del mundo del espectáculo, como agentes, directores de casting o directores de producción. “Es importante que aquí todo el ecosistema se una para crear producciones innovadoras”, afirmó.
También se abordó la cuestión del lenguaje en el teatro. Para Adama Diop, la diversidad lingüística no debería ser un obstáculo, sino más bien una fuente de innovación.
Adama Diop expresó su esperanza de que el proyecto sea apoyado por las autoridades senegalesas, aunque ya cuenta con el apoyo del Instituto Francés. “Espero que el gobierno nos apoye”, dijo.
Según el fundador, la instalación de la escuela en la casa del artista Ousmane Sow es un símbolo fuerte e inspirador para los jóvenes artistas senegaleses.
La escuela también pretende mejorar el nivel de los actores de las series de televisión local, ofreciendo formación continua a los profesionales que ya están en actividad.
Adama Diop, elegido mejor actor en Francia en 2021, subrayó la importancia del teatro como herramienta política, que permite llegar al público de forma colectiva y emocional. “Es maravillosamente político”, concluyó.
Adama Diop alberga la esperanza de poder montar espectáculos en Senegal: “Es uno de mis grandes deseos”, confiesa.
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