El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, amenazó este domingo a los hutíes con actuar “con fuerza y determinación”, un día después de que un ataque de los rebeldes de Yemen dejara 16 heridos en Tel Aviv, en el centro de Israel.
“De la misma manera que actuamos con fuerza contra las armas del eje del mal iraní, actuaremos contra los hutíes… con fuerza, determinación y sofisticación”, dijo en un vídeo distribuido por su oficina. “Aunque llevará tiempo, el resultado será el mismo que con otros grupos terroristas”.
Los hutíes forman parte de lo que Irán llama el “eje de resistencia”, que agrupa a otros movimientos hostiles a Israel, como el palestino Hamás, los grupos iraquíes y el libanés Hezbolá.
Los rebeldes yemeníes se atribuyeron el lanzamiento durante la noche del viernes al sábado de un misil balístico que las fuerzas israelíes no lograron interceptar y que dejó 16 personas levemente heridas en Tel Aviv, principalmente víctimas de fragmentos de vidrio.
Afirmaron haber llevado a cabo este ataque en solidaridad con el pueblo palestino en la Franja de Gaza, devastada por más de un año de guerra entre Israel y Hamás, y en “represalia por la agresión israelí contra (su) país”.
Horas más tarde, el ejército estadounidense, cuyo país es aliado de Israel, anunció que había atacado instalaciones militares hutíes en la capital yemení, Saná.
Los rebeldes, que controlan gran parte de Yemen, incluida Saná, atacan periódicamente a barcos vinculados según ellos con Israel, Estados Unidos o el Reino Unido en el Mar Rojo y en el Golfo de Adén.
Los ataques estadounidenses tuvieron como objetivo “una instalación de almacenamiento de misiles y un centro de mando”, anunció el Comando militar estadounidense para Oriente Medio (Centcom), asegurando que también había derribado drones rebeldes y misiles de crucero sobre el Mar Rojo.
“Una amenaza”
“No actuamos solos”, subrayó Benjamín Netanyahu en su vídeo del domingo. “Estados Unidos, junto con otros países, ve a los hutíes como una amenaza no sólo para el transporte marítimo internacional, sino también para el orden mundial”.
Los rebeldes yemeníes ya habían disparado el jueves un misil contra Israel, que causó importantes daños materiales a una escuela cerca de Tel Aviv, provocados por “una interceptación parcial”, según el ejército israelí.
En respuesta, estos últimos bombardearon los puertos y las infraestructuras energéticas de los rebeldes en Yemen, país situado a más de 1.500 kilómetros al sudeste de Israel, matando a nueve de ellos, según su líder.
Benjamín Netanyahu ya había lanzado una advertencia a los hutíes, declarando que “quien ataque a Israel pagará un precio muy alto”.
“No sólo nos están atacando a nosotros, sino que están atacando al mundo entero”, afirmó. “Cuando Israel actúa contra los hutíes, lo hace en nombre de toda la comunidad internacional. Los estadounidenses, como otros, son muy conscientes de ello”.
Desde el inicio de la guerra desencadenada el 7 de octubre de 2023 por el ataque sin precedentes de Hamás en suelo israelí, los rebeldes, apoyados por Irán, han lanzado numerosos ataques contra Israel.
La mayoría de ellos fueron contrarrestados o sólo causaron daños materiales. Pero en julio, la muerte de un civil israelí, asesinado en Tel Aviv por la explosión de un dron disparado desde Yemen, provocó un ataque aéreo de represalia contra Hodeida, que causó seis muertos y daños importantes.