El Consorcio Juvenil Senegalés (Cjs) de Guédiawaye está generando entusiasmo entre los jóvenes. Estudiantes, artistas, responsables de proyectos, jóvenes que buscan formarse se unen para trazar un futuro. El Cjs se creó hace cuatro años para ayudar a los jóvenes a expresar su potencial a través del emprendimiento, la formación y el apoyo comunitario.
El Centro de Educación Popular y Deportiva (Cedeps) de Guédiawaye reaviva el ambiente. Esta tarde del miércoles 11 de diciembre de 2024, en la fachada exterior, un joven bailarín practica moviéndose en el suelo, con la frente empapada de sudor. Al atravesar la puerta situada justo detrás de él, nos encontramos en el vestíbulo del edificio que alberga el Consorcio de Jóvenes de Senegal (Cjs). Los jóvenes, niños y niñas, se sientan en pequeños grupos y charlan tranquilamente. Al otro lado, a su derecha, un dúo de jóvenes también practica el baile al son de las notas musicales destiladas por un pequeño altavoz. “Están ensayando”, informa Simon Maro, responsable de comunicación de los Cjs. Este último nos guía al espacio reservado para los estudiantes que vienen a repasar sus lecciones, o simplemente participar en otra actividad de la agenda de Cjs. Aquí, dos jóvenes se sientan aislados de otros grandes grupos. Uno de ellos es estudiante de logística de transporte. Su nombre es Moustapha Sy. Vino a investigar para una presentación que está preparando.
“Vengo aquí porque es un entorno que encuentro propicio. Cada vez que un estudiante tiene dificultades en su investigación, siempre hay otros que están ahí para brindarle información”, testifica este joven. Considera además que el acceso a la conexión wifi también es una oportunidad al alcance de todos los estudiantes que utilicen el espacio. Según él, incluso sucede que los estudiantes que asisten al centro se benefician de una formación en marketing digital o desarrollo personal. Sin embargo, sugiere la creación de una biblioteca más surtida de libros de calidad para que los estudiantes puedan aprovecharlos para mejorar su documentación. De hecho, en este preciso momento, otros estudiantes se encuentran agrupados alrededor de mesas como si estuvieran en una sesión de trabajo. Entre ellos, Saphiétou Lo, estudiante de la universidad digital Cheikh Hamidou Kane, en Eno en Guédiawaye. “Vengo aquí a veces para revisar, otras veces para hacer trabajo práctico. Es un espacio tranquilo que no está lejos de mi casa. Luego, el acceso es gratuito, está la conexión a internet. Es realmente un lugar donde realmente puedes concentrarte”, dice. Otros estudiantes están más interesados en los encuentros que se organizan periódicamente en torno al tema: “compromiso ciudadano”.
Este es el caso de Leïla Diakité, estudiante de tercer año de Administración de la Economía Social en la Universidad Digital Cheikh Hamidou Kane. Con una sonrisa en los labios, habla con confianza del interés que tiene por este lugar de frecuentación. “Me interesa especialmente la actividad relacionada con la gestión del estrés, porque me ha ayudado mucho a expresarme en público”, confiesa.
Acceso gratuito, servicio gratuito.
“El consorcio nos ha proporcionado, como artistas, un marco que nos ayuda a desarrollar nuestro talento y prosperar”, afirma el artista y comediante Mamadou Faye alias Ngouda. La community manager de Cjs, Anta Dia, acaba de bajar el último escalón de la escalera. Su función es coordinar las actividades del consorcio, gestionar el espacio y organizar a los jóvenes que acuden al centro. Explica que, en general, de 9 a 16 horas, este espacio situado en las afueras de Dakar es más frecuentado por alumnos y estudiantes. En cambio, a partir de las 16 horas, son los artistas y grupos de ensayo quienes toman el relevo. “El centro organizó 26 cursos de formación sobre artes visuales, primeros auxilios, mecanografía, así como sobre temas divertidos y de sensibilización en beneficio de los niños. De la misma manera se capacita a los jóvenes en el desarrollo personal. El estudio de grabación estará listo pronto. Pero el espacio reservado para espectáculos ya tiene una gran demanda. Simplemente presente una solicitud dirigida al director del Cdeps. Una vez validado, el espacio se pone a disposición del solicitante de forma gratuita”, explica.
El director ejecutivo del Youth Hope Consortium (Cjs), Sobel Ngom, explica la génesis del Cjs. “Nuestra demografía está aumentando y la escuela no puede brindar educación a todos los jóvenes que la necesitan. Las actividades socioeducativas se han reducido drásticamente. Ya no pueden llegar a un número significativo de personas. Además, ya no pueden ofrecer servicios de entretenimiento que cumplan con los desafíos de 2024”, subrayó. Según él, es en ese contexto que nació la Cjs y pretende replicarse en todos los departamentos e incluso en todas las comunidades para desarrollar actividades de seguimiento, juventud, emancipación, expresión, etc.
“Con las actividades que llevamos a cabo gracias a una colaboración con la Agencia Francesa de Desarrollo (Afd) y la Fundación Mastercard, todos los jóvenes sin exclusión pueden recibir ayuda para convertirse en lo que desean ser”, añadió.
En otras palabras, un joven talentoso, pero cuyo talento no es valorado o incluso rechazado, puede tener la oportunidad de desarrollar su talento asistiendo a los Cjs. Del mismo modo, continúa, el alumno que tiene dificultades para repasar en casa encontrará en este espacio un marco en el que concentrarse. Pero también, en el caso de las asociaciones que quieran implicarse, el centro está ahí para apoyar el compromiso asociativo. Los jóvenes que buscan formación también pueden tener oportunidades con los Cjs. “Claramente, es el joven quien está en el centro de nuestra acción. Cualquier joven puede acceder al centro. Todo lo que necesita es registrarse.
Abdou Diop