Miles de georgianos se reunieron de nuevo el viernes 29 de noviembre en el centro de Tbilisi, ante el llamamiento de la oposición proeuropea. La manifestación se produce tras la detención, la víspera, de una cuarentena de manifestantes opuestos al gobierno, acusados de deriva autoritaria prorrusa.
Este país caucásico está sumido en la agitación desde las elecciones legislativas del 26 de octubre, ganadas por el partido gobernante Sueño Georgiano, pero denunciadas como manchadas por irregularidades por parte de la oposición, los observadores internacionales y la presidenta, Salomé Zourabichvili.
El Sueño Georgiano y el gobierno que surgió de él son acusados por sus detractores de desviar a esta ex república soviética de su ambición declarada de ingresar en la Unión Europea y, por el contrario, de querer acercar Tbilisi a Moscú. Algunos georgianos consideran a Rusia, que invadió el país en 2008, como una amenaza y a Occidente como un baluarte.
Georgia obtuvo oficialmente el estatus de candidato a la membresía de la UE en diciembre de 2023, pero desde entonces Bruselas ha congelado el proceso, acusando al gobierno de un grave retroceso democrático. Si las autoridades aún aseguran que tienen intención de ingresar en la UE en 2030, anunciaron el jueves por la noche que pospondrían la cuestión hasta finales de 2028.
A pesar de la fuerte presencia policial, varios miles de personas se reunieron el viernes frente al edificio del Parlamento, bloqueando el tráfico en la principal avenida de la capital. “El autoproclamado gobierno del Sueño Georgiano está haciendo todo lo posible para destruir las posibilidades de Georgia de unirse a la Unión Europea”dijo a la AFP una manifestante, Laura Kekelidze, profesora de 39 años.
La medida llevó a miles de partidarios de la oposición pro-UE a salir a las calles en protesta, reuniéndose en la capital, Tbilisi, y otras ciudades durante la noche. El jueves por la tarde y el viernes por la mañana, la policía antidisturbios disparó balas de goma y utilizó gases lacrimógenos y cañones de agua, golpeando a manifestantes y periodistas frente al Parlamento, constató un periodista de la AFP. Según el Ministerio del Interior, “43 personas fueron arrestadas” durante la noche de jueves a viernes. Según él, 32 policías resultaron heridos. “tras las acciones ilegales y violentas de los manifestantes”.