Un pequeño lavado de cara del paisaje urbano de Casablanca. El Ayuntamiento de Casablanca quiere normalizar las terrazas de cafés y restaurantes, especialmente en las principales avenidas. Además del estricto cumplimiento de las normas relativas a la ocupación de bienes públicos, los propietarios de estas marcas ahora deberán prestar atención a la estética.
Para llevar a cabo este proyecto, el ayuntamiento recurrió a los servicios de un ingeniero urbanista. En concreto, las empresas afectadas estarán sujetas a una carta que garantiza, en particular, la estandarización de los colores.
El bulevar Zerktouni, que acaba de ser objeto de obras de remodelación valoradas en más de 112 millones de dírhams, ha sido designado “lugar piloto” para esta operación.
Así, cada bulevar tendrá un color específico, en armonía con el paisaje circundante. En el caso concreto del bulevar Zerktouni, se optó por el color azul medianoche.
La nueva carta llega en el momento adecuado para acompañar un amplio programa de modernización de las principales arterias de Casablanca, lanzado recientemente por el ayuntamiento, que afecta a los bulevares Zerktouni, La Mecca y Taddart, entre otros.
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Por su parte, los propietarios de cafeterías y restaurantes acogen con cierto escepticismo la nueva normativa. “Imponer un color restringirá la posibilidad de que los comerciantes utilicen su libertad de elección», estima Mohamed Abdelfadel, secretario general de la Federación Marroquí de Cafés y Comida Rápida.
Y para agregar: “Casablanca es la capital económica de Marruecos, un país favorable al liberalismo económico y comercial. La elección de esta política abierta ha convertido a Marruecos en el destino regional y continental preferido de las franquicias internacionales, y en un terreno fértil para la creación y el desarrollo de franquicias nacionales.».
Mohamed Abdelfadl pide a los actores políticos que tengan en cuenta las especificidades de las empresas y franquicias nacionales e internacionales, donde el color forma parte de la identidad visual de los proyectos y de su estrategia de marketing. “Los colores a veces expresan diversidad de género o afiliación deportiva, política, etc. Cada comerciante se dirige a una clientela bien específica», explica, poniendo el ejemplo de “Café con amor”, una joven franquicia marroquí en el bulevar Zerktouni, que se dirige a una clientela femenina, y cuyo color rosa es parte integrante de la identidad visual y del modelo económico. “Esta elección ya no será posible con las nuevas restricciones del ayuntamiento», lamenta el secretario general de la Federación Marroquí de Cafés y Comida Rápida.