Con 27 animales sacrificados, la primera caza preventiva del lobo en Suiza superó las expectativas el pasado invierno en el Valais. Sin embargo, cinco cachorros y seis lobos adultos asesinados no pertenecían a las manadas autorizadas para el sacrificio por la Oficina Federal de Medio Ambiente (FOEN), revela el periódico “SonntagsBlick”. Así lo demostraron los análisis de parentesco realizados por un laboratorio de la Universidad de Lausana, consultados por el periódico dominical en virtud de la ley de transparencia.
La FOEN confirma haber sido informada de los sacrificios erróneos, pero no quiere hacer comentarios al respecto, la aplicación de la regulación del lobo corresponde a los cantones. La Oficina espera, sin embargo, que las primeras experiencias ayuden a asesorarlos mejor en el futuro, en particular sobre medidas para “evitar mejor las tomas erróneas”. Berna, sin embargo, no ha impuesto nuevas directivas para la segunda caza preventiva del lobo, que se celebrará hasta finales de enero en el Valais. Y la FOEN incluso aprobó en septiembre pasado matar dos o incluso tres manadas más bajo la presión de las autoridades cantonales, recuerda el periódico.
Para David Gerke, director del Swiss Wolf Group (GLS), estas tomas erróneas demuestran que el Valais no controla el seguimiento de los lobos: “El cantón desconoce las zonas por donde pasan las manadas o las malinterpreta”. Sin embargo, es fundamental identificar las zonas de tiro con la mayor precisión posible, porque a los guardas forestales les resulta imposible identificar visualmente a qué manada pertenece un lobo, subraya. Pero según él, las autoridades del Valais no están muy interesadas en el control de la calidad del lobo. “La política quiere matar tantos lobos como sea posible”, opina.
Los tiros equivocados no son ilegales
El cantón no respondió a las preguntas del periódico de habla alemana sobre estos disparos erróneos ni sobre cómo pretende evitarlos en el futuro. Pero el Servicio de Caza, Pesca y Vida Silvestre del Valais (SCPF) indicó que la matanza errónea de estos lobos en las zonas de caza definidas por el cantón y aprobadas por la FOEN no era ilegal. Los depredadores pueden ser asesinados dentro del perímetro autorizado independientemente de su identidad genética. Sin embargo, los análisis genéticos permitirían comprender mejor la estructura y distribución de las manadas y contribuir así al seguimiento de las poblaciones de lobos, escribe el servicio.