El plan del primer ministro Shigeru Ishiba aún debe ser aprobado en el Parlamento, donde el gobierno ya no tiene mayoría absoluta.
Publicado el 22/11/2024 11:33
Actualizado el 22/11/2024 13:55
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El Gobierno japonés aprobó, el viernes 22 de noviembre, un plan de recuperación equivalente a 136.000 millones de euros para reforzar el poder adquisitivo de los consumidores frente a la inflación y estimular un crecimiento lento. Este plan de 21,9 billones de yenes llega un mes después de un amargo fracaso electoral de la coalición gobernante. Aún deberá ser aprobado en el Parlamento, donde el gobierno del primer ministro Shigeru Ishiba ya no tiene mayoría absoluta.
El programa incluye paquetes de alrededor de 30.000 yenes (186 euros) para hogares de bajos ingresos, subsidios para combustible y energía, ajustes fiscales, así como asistencia para pequeñas empresas, según el gobierno. “El objetivo es garantizar que la progresión salarial sea regularmente superior a la inflación y garantizar una transición hacia una economía orientada al crecimiento, impulsada por los aumentos salariales y la inversión”según un comunicado de prensa.
El impacto global podría alcanzar los 39.000 millones de yenes (242.000 millones de euros) si se suman los préstamos y las inversiones del sector privado. Todo se financiará con mucho gasto público adicional, lo que requerirá que se apruebe un presupuesto modificado a finales de diciembre.
Para el Primer Ministro Shigeru Ishiba, impulsar el consumo era una prioridad. Después de prometer, tras su nombramiento a principios de octubre, apoyar a los hogares de bajos ingresos y revitalizar las regiones rurales, sufrió un duro fracaso en las elecciones legislativas anticipadas de finales de octubre. En la votación tuvo mucho peso el descontento por el aumento de los precios al consumo. La inflación, que está lastrando el gasto de los hogares, alcanzó nuevamente el 2,3% en octubre, con un aumento histórico del 59% en los precios del arroz en un año.