Quedan pocos días para criticar públicamente los análisis de los especialistas en meteorología, escondiéndose detrás de su pantalla. “Como medida de ahorro, pero también debido al aumento de los comentarios de tono negativo”, explica MétéoSuisse, que ha decidido eliminar la posibilidad de que los lectores se expresen en su blog, principal canal de comunicación de la Oficina Federal de Meteorología y Climatología.
Desde 2014, los interesados pueden reaccionar en el sitio a artículos que tratan sobre fenómenos meteorológicos o incluso sobre el cambio climático. Pero a partir del 30 de noviembre ya no tendrán derecho a ello. Según un estudio realizado en primavera por la Universidad de Economía de Zúrich, alrededor del 15% de los lectores han escrito al menos un comentario en el blog. MétéoSuisse también informa que, entre las más de 30.000 publicaciones enumeradas en los últimos dos años, 8.000 fueron rechazadas porque no cumplían las condiciones (comentarios discriminatorios, contenidos sexistas, obscenos o que incitaban a la violencia, o incluso ataques personales).
Además del procesamiento, la activación y las respuestas que llevan tiempo, la oficina dice que tendrá que aplicar las directrices económicas federales en los próximos años. Pero el aumento de reacciones “más agresivas y negativas” en los últimos cinco años también ha inclinado la balanza. “Hoy en día, lamentablemente, la función de comentarios se utiliza cada vez más para difundir teorías de conspiración, odio e intolerancia. Por eso es cada vez más difícil ofrecer un foro objetivo, útil y enriquecedor para todos”, lamenta MeteoSwiss. Sin embargo, los especialistas seguirán estando accesibles en las redes sociales.
“Lamento esta decisión”
Por ello, el anuncio del lunes no dejó de hacer reaccionar a los lectores. “Qué lástima que un sitio de información de su calidad sufra la estupidez de un número cada vez mayor”, lamenta Pascal, que considera esta decisión “un error”. “Siempre es por unos que se castiga a otros”, añade otro lector. Y Marco añadió: “Puedo comprender la dificultad de moderar los comentarios, pero lamento que esta decisión, tomada en función de la situación financiera, provoque una regresión en el espacio democrático”.
