Varios sindicatos de servicios públicos desean iniciar una jornada de acción y huelga el jueves 5 de diciembre. La CGT, la CFDT, así como la UNSA, el FSU e incluso Solidaires y CFE-CGC convocan manifestaciones en todo el país.
Varios sindicatos de funcionarios convocaron el jueves una jornada nacional de “acción” y “huelga” el 5 de diciembre para denunciar, en particular, recortes presupuestarios en la administración por valor de 1.200 millones de euros, según un comunicado de prensa firmado por siete de los ocho organizaciones.
La “CGT, CFDT, UNSA, FSU, Solidaires, CFE-CGC y FA-FP convocan a los agentes de la función pública a una jornada de acción, mítines, manifestaciones y huelgas en todo el país el 5 de diciembre de 2024”, dijeron en una prensa. liberar.
Sólo Force Ouvrière, el segundo sindicato de toda la función pública, no se sumó a esta declaración y mantuvo un llamamiento a una huelga renovable de tres días “al mismo tiempo que la huelga de los ferroviarios”, “a partir del 10 o 11 de diciembre”. “, dijo a la AFP el secretario general de la UIAFP-FO, Christian Grolier.
Dos medidas problemáticas
Tras una tensa reunión con el Ministro de la Función Pública, Guillaume Kasbarian, hace aproximadamente una semana, las ocho organizaciones sindicales representativas anunciaron su deseo de movilizarse.
De hecho, los anuncios del gobierno sobre ahorros en el sector en el presupuesto de 2025 han llevado a los interesados a exigir, en particular, el abandono de dos medidas. Se trata de la reducción del 100 % al 90 % de la compensación por las bajas por enfermedad de los funcionarios y de la introducción de tres días de espera no remunerados, en lugar de uno actualmente, durante estas ausencias, excluyendo las patologías graves.
Si Guillaume Kasbarian dio un paso atrás al abandonar el proyecto de fusión de las categorías de funcionarios (A, B y C) mencionado por su predecesor, en realidad defendió “dos medidas de responsabilidad” relativas a la ampliación del período de espera y la reducción de las indemnizaciones por bajas laborales, justificada según él por una situación presupuestaria “crítica para las finanzas públicas”.
Otras reivindicaciones sindicales se refieren a la apertura de negociaciones salariales, la anunciada eliminación de puestos de funcionarios y la suspensión de la Garantía Individual del Poder Adquisitivo (Gipa), suma destinada a compensar la inflación.