El embajador representante permanente de Marruecos ante la ONU, Omar Hilale, afirmó, el lunes, que la evaluación del papel de la ONU en la cuestión del Sáhara marroquí entra únicamente dentro del mandato del secretario general y del Consejo de Seguridad.
En respuesta, durante una rueda de prensa, a una pregunta sobre la lectura por parte de Marruecos de la declaración del enviado personal del Secretario General para el Sáhara marroquí, Staffan de Mistura, en su última exposición informativa ante el Consejo de Seguridad, para reevaluar el papel de la Naciones Unidas sobre la cuestión del Sáhara ante la falta de avances en los próximos seis meses, Hilale argumentó que “La reevaluación del papel de la ONU en la cuestión del Sahara no le concierne y no entra dentro de su mandato. Está dentro del mandato del Secretario General y de los miembros del Consejo de Seguridad”.
“El mandato del Enviado Personal para el Sáhara es facilitar la solución entre las partes”, aclaró el diplomático, señalando que para lograr avances significativos, el Enviado Personal debe implementar su mandato de facilitación “de conformidad con su carta de nombramiento del Secretario General, así como con las resoluciones del Consejo de Seguridad”.
Hilale en este sentido se refirió a la “Guía de la ONU para facilitar las negociaciones”, que incluye “información clara sobre el papel de los facilitadores, cuyo primer principio es esforzarse por implementar su mandato y el segundo principio es demostrar autoridad”.
En este sentido, el embajador pidió al Enviado Personal que demuestre la autoridad necesaria para relanzar el proceso de mesa redonda. “Le pedimos que implemente su mandato y actúe con autoridad. ¿Lo hizo? No lo creemos”. declaró.
“Alentamos al Enviado Personal a utilizar su autoridad de manera eficaz, en lugar de aceptar la negativa de Argelia”, dijo Hilale, recordando que los antiguos enviados personales, Christopher Ross y Horst Köhler, nunca solicitaron la opinión de Argelia y de las demás partes, ni sobre las fechas ni sobre los lugares de las negociaciones, para convocar, respectivamente, las consultas de Manhasset y la ronda de Ginebra. mesas. “Esperamos que el señor De Mistura actúe de la misma manera y muestre autoridad”. insistió.
Respecto a la valoración de la situación, el diplomático aclaró que “Marruecos no pretende evaluar el papel de la ONU”señalando que “El éxito de los avances del próximo mes de abril se medirá en función de si se celebran o no mesas redondas en Ginebra”.
En este sentido, Hilale se refirió a la reciente declaración de Suiza, expresando su voluntad de acoger la tercera serie de mesas redondas. “Tenemos el lugar. Lo que falta ahora es la autoridad del Enviado Personal y la implementación de su mandato”. concluyó.
