El Banque Centrale Populaire (BCP) ha renovado su certificación ISO 50001, adoptando su nueva versión 2018, para la sede del BCP y el Data Center de Diouri. Esta certificación es un reconocimiento a la estrategia implementada por el Banco en el ámbito de la eficiencia energética, con el objetivo de promover la gestión racional de la energía, incentivar el uso de energías renovables y reducir su huella de carbono.
“La renovación de la certificación ISO 50001, en su versión 2018, marca un paso clave en el enfoque sustentable iniciado por el Banco hace más de ocho años. También refuerza su papel de liderazgo en términos de gestión racional de la energía”, afirmó la alta dirección en un comunicado de prensa.
Una estrategia energética sostenible y eficiente
Desde la adopción, en 2016, de un Sistema de Gestión de Energía (SGA) que cumple con la norma ISO 50001, BCP ha sido parte de una dinámica de mejora continua. En 2023, la revisión de su política energética para cumplir con la versión 2018 de esta certificación permitió integrar las prácticas más avanzadas en este ámbito, al tiempo que reforzó el compromiso de todas sus estrategias de gestión, en este enfoque eco-responsable.
La implementación del SGA permitió reducir la factura eléctrica del Banco en un 17%, gracias a iniciativas concretas, entre ellas:
• Modernización de los sistemas de iluminación: mediante la conversión de instalaciones a soluciones LED energéticamente eficientes.
• Optimización de la gestión energética: mediante la instalación de sistemas inteligentes para monitorizar y reducir el consumo energético.
• La renovación de infraestructuras de alto consumo energético: mediante la adopción de tecnologías innovadoras, como las que permiten la sistemas de recuperación de energía y “Inverter”.
• Mejora de los Centros de Datos: con la implantación de soluciones de refrigeración eficientes y adaptadas a las necesidades.
• El fomento de las energías renovables: mediante el uso de energía solar térmica y fotovoltaica para producir energía limpia.
Gracias a estos esfuerzos, BCP ha logrado una ganancia energética equivalente a 104 millones de dírhams desde 2016, adaptando al mismo tiempo sus prácticas a las normas internacionales y a los desafíos medioambientales de Marruecos.
Un compromiso a largo plazo
El EMS implementado dentro de BCP le permite maximizar su eficiencia energética, identificar continuamente oportunidades de mejora y optimizar su contabilidad de carbono.
“En este sentido, la certificación ISO 50001 v2018 confirma su firme voluntad de ir aún más lejos en la estructuración de sus iniciativas energéticas. En 2024, el Banco prevé ampliar su alcance a nuevos emplazamientos, como parte del despliegue y consolidación de su estrategia energética”, informa la misma fuente.
Con esta certificación, BCP reafirma su ambición de combinar responsabilidad ambiental, innovación sustentable y excelencia operativa para generar un impacto positivo en la economía y la sociedad.