A partir del 1 de enero de 2025 ya no será posible instalar estufas de leña que no cumplan la directiva de ecodiseño de la Unión Europea. Todas las chimeneas deben revisarse y barrerse al menos una vez al año.
Si bien se trata de un importante paso adelante, para algunos no es suficiente. Una petición para prohibir las estufas de leña ha recogido 187 firmas de las 1.000 necesarias para escuchar a la Comisión de Energía. Para los colectivos, este es un grave problema de salud pública. “El marco legal de Bruselas no establece ninguna normativa sobre calefacción de leña, estufas de leña… Son los aparatos más contaminantes”explica Laurent Scholtus, representante del colectivo ‘Chase The Smoke’.
De hecho, denuncia el peligro para la salud, en particular debido a la emisión de partículas finas. “Las finas partículas que se producen en un día de fuego abierto equivalen a más o menos 7.000 kilómetros recorridos por un coche diésel”.
También se envió una carta abierta al gobierno firmada por 100 médicos.
■ Informes de Julie Vanhonakker y Nicolas Scheenaerts
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