Sophie Binet en París el 17 de octubre de 2024. (AFP/ALAIN JOCARD)
La líder de la CGT, Sophie Binet, teme “un maremoto” en los próximos meses, temiendo planes en cascada, en una entrevista con Les Echos este miércoles 27 de noviembre.
Hasta
200.000 puestos de trabajo amenazados.
La secretaria general de la CGT, Sophie Binet, advirtió sobre un
“Aceleración muy fuerte del deterioro de la situación”
en términos de planes sociales, principalmente en la industria pero también en otros sectores, en una entrevista con
ecos
que se publicará este miércoles 27 de noviembre.
Mientras que en mayo hablaba de 130 planes sociales que representaban 33.021 puestos de trabajo directos eliminados o “fuertemente amenazados” (60.000 contando la subcontratación y el trabajo temporal), a principios de noviembre de cerca de 200 planes sociales y 150.000 puestos de trabajo amenazados por una “sangrado industrial violento” , Sophie Binet evoca ahora
“Cerca de 250 planes de despidos en preparación, que afectan a entre 170.000 y 200.000 puestos de trabajo”.
en esta entrevista previa a la rueda de prensa sobre el sector que celebrará este miércoles por la tarde.
Este recuento, realizado a partir de la información proporcionada por los activistas sindicales de trabajadores, preocupa, como era de esperar,
sectores en crisis como el automóvil y el aeroespacial,
pero también el
gran distribución,
según el jefe de la central sindical. ella teme
“un maremoto” en los próximos meses,
por temor a planes en cascada: “estos planes se aplican especialmente en las grandes empresas, las reestructuraciones corren el riesgo de tener consecuencias para los pequeños subcontratistas, que son mucho más numerosos”, advierte el líder de la CGT.
La CGT convoca a “verdaderas asambleas generales del sector para volver a encarrilar todo”
Para explicar este aumento de poder, Sophie Binet señala
“la responsabilidad de las grandes empresas”,
quien según ella “hizo la elección durante el período de inflación
aumentar sus márgenes y sus precios aumentar sus dividendos”,
con la consecuencia de una caída de las inversiones, una caída de los salarios en euros constantes “y por tanto una
reducción del consumo.
También discrepa de la política de oferta aplicada desde el primer mandato de cinco años de Emmanuel Macron,
“un naufragio político”,
según ella.
Entre las medidas de emergencia defendidas por Sophie Binet: “una
vuelta a los precios regulados” de la energía para la industria,
“que tiene en cuenta el coste de producción” y
inversiones necesarias para la reactivación de la energía nuclear;
el establecimiento por parte de Europa de
barreras aduaneras “más protectoras”;
pero también “un
fortalecimiento de la ley Florange”,
que obliga al empresario a buscar un comprador en caso de un cierre previsto y su extensión a las PYME de 50 o más empleados. A más largo plazo, pide “hacer
declaraciones generales reales de la industria
para volver a armar todo.”