A última hora de la tarde del martes, cuando el Ayuntamiento de Quebec terminaba en un cierto letargo, una moción presentada sin previo aviso por la oposición oficial dio lugar a una disputa política inusual.
Alicia Despins, concejal municipal de Quebec en primer lugar, presentó un breve texto para felicitar a la empresa Raymond Chabot Grant Thornton por su reciente informe de auditoría sobre las empresas de transporte. Quería que los miembros del ayuntamiento de Quebec agradecieran a la empresa independiente que “participa en la mejora de la RTC (Réseau de transport de la Capitale)” gracias al documento que ha elaborado. A pesar de la evidente incredulidad de varios funcionarios electos, Despins juró a sus colegas que “no hay nada político en esta opinión”.
Siguió un largo debate legal. Fueron necesarios muchos minutos para saber si este depósito requería la unanimidad de los miembros del consejo municipal o una mayoría simple.
Pierre-Luc Lachance, vicepresidente del comité ejecutivo, rechazó este texto y explicó que “es una puerta que no se puede abrir”. De lo contrario, deberíamos, por ejemplo, felicitar a la Caja de depósito y colocación de Québec Infra (CDPQI) por haber recomendado un tranvía en su informe presentado en junio, sugirió medio en serio, medio riendo.
Moción rechazada
Los dos asesores prioritarios de Équipe quebequenses se pusieron del lado de la oposición oficial. Por su parte, la responsable de Transición de Quebec, Jackie Smith, se opuso firmemente. Lamentó que el partido de Claude Villeneuve haya utilizado la herramienta “unificadora” de las mociones sin previo aviso “para dividir y hacer política”.
En general, las mociones sin previo aviso se utilizan para felicitar a un ciudadano distinguido o para conmemorar el fallecimiento de una personalidad regional. Rara vez son objeto de debate y, a menudo, se adoptan por unanimidad.
Como era de esperar, la moción propuesta por la Sra. Despins fue rechazada, ya que el equipo del alcalde Marchand tiene una estrecha mayoría en el consejo municipal.
Publicado hace dos semanas, el informe de la empresa independiente sitúa a la RTC en el noveno lugar – sobre diez – entre las empresas de transporte de Quebec en términos de resultados financieros. Su contenido volvió a dar lugar a amargos intercambios políticos el martes por la mañana.