El Primer Ministro quiere autorizar un aumento de 0,5 puntos de los impuestos sobre las transferencias, a veces llamados “gastos notariales”, durante tres años.
Michel Barnier hace un gesto a favor de los departamentos. El Primer Ministro propuso el viernes 15 de noviembre aumentar el límite máximo de los derechos de transferencia, un impuesto sobre las ventas de inmuebles recaudado por las comunidades.
“Lo haremos en un período de tres años, por un importe de 0,5 puntos y al final haremos un balance”, declaró Michel Barnier.
Estos impuestos de transferencia para pago (DMTO), a veces llamados honorarios notariales, corresponden a un impuesto a las transacciones inmobiliarias compartido entre departamentos, municipios y el Estado.
“Impuestos a las transferencias que se han derrumbado”
Este aumento no será obligatorio, sino voluntario. De este modo, cada departamento podrá decidir si aumenta o no el tipo del impuesto a las transferencias. Según el Primer Ministro, esta medida podría representar un recurso potencial de mil millones de euros.
Este anuncio corresponde a una petición de los departamentos para compensar la caída de sus ingresos y el aumento de sus gastos. Para las comunidades, los impuestos sobre transferencias representan una ganancia inesperada esencial, pero se ha disipado en los últimos meses a raíz de la caída de las ventas de inmuebles.
“Tenemos impuestos a las transferencias que se han desplomado. Este año nuevamente estamos perdiendo el 35% de los impuestos a las transferencias, lo que representa, según el departamento, entre el 20 y el 30% de nuestros ingresos. Se pueden imaginar el impacto, es considerable”. alertó François Sauvadet, presidente de los departamentos de Francia, a finales de octubre.
“Una medida contraproducente”
Pero los agentes inmobiliarios temen que este aumento de impuestos obstaculice la recuperación del mercado. “Esta medida será contraproducente en un momento en el que el mercado empezaba a recuperar impulso y necesitaba un mensaje de optimismo”, reacciona Loïc Cantin, presidente de la Federación Nacional de la Propiedad Inmobiliaria (Fnaim), a BFM Business.
“Podemos comprender las incertidumbres presupuestarias de las comunidades, pero no podemos achacar esta falta de ingresos a los hogares y al acceso a la propiedad, que hoy se encuentra en grandes dificultades”, continúa.
“Es parte del poder adquisitivo que se está devorando”.
Un análisis compartido por Maël Bernier, portavoz del corredor Meilleurtaux, que denuncia “muy malas noticias para los compradores más jóvenes”. “Como el consumo es bajo entre los más jóvenes, esto dificultará aún más su primera compra”, advierte.
Incluso el Ministro de Vivienda se mostró reticente. “Si reiniciamos la producción de viviendas, si recuperamos el buen estado del mercado inmobiliario, se obtendrá mucho más que un aumento de impuestos”, afirmó en franceinfo a finales de octubre.
No parece haber sido escuchada, aunque el Primer Ministro hubiera querido tranquilizarla. “Por supuesto, debemos permanecer atentos para preservar las condiciones de recuperación inmobiliaria que queremos fomentar con la ministra de Vivienda, Valérie Letard, ya que este importante sector está paralizado”, declaró este viernes.