Increíble pero cierto. A un director ejecutivo de Corea del Sur se le ordenó pagar a su ex esposa más de mil millones de dólares después de su divorcio, un récord.
El increíble divorcio de Chey Tae-Won, un rico CEO surcoreano y su ex esposa, Roh So-young, está haciendo correr mucha tinta y saliva.
De hecho, en Corea del Sur, el Tribunal Superior de Seúl, la capital del país, ordenó a un director ejecutivo pagar mil millones de dólares a su ex esposa.
En su sentencia, la institución judicial surcoreana considera que Roh So-young contribuyó en gran medida a construir la fortuna de su exmarido Chey Tae-won.
Cabe señalar que se trata del jefe del conglomerado SK Group, especialista mundial en semiconductores, segundo productor mundial de tarjetas de memoria y primer operador de telefonía móvil de Corea del Sur.
Chey Tae-won se casó con Roh So-young en 1988, cuyo padre Roh Tae-woo era entonces Presidente de la República.
Así, el tribunal considera que gracias principalmente a su esposa Chey pudo entrar en el mercado de la telefonía móvil en Corea del Sur.
Para este proceso judicial, el jefe del Grupo SK supo imponerse y construir un imperio gracias a la influencia y a la libreta de direcciones bien surtida de su ex suegro.
Si bien su fortuna se estima hoy en 4.000 mil millones de wones, o 3 mil millones de dólares, Chey Tae-won tendrá que pagar un tercio de esta fortuna a su ahora expareja.
Cabe señalar que una sentencia anterior había asignado a la esposa sólo una vigésima parte de su fortuna como compensación. Pero, no satisfecha con esta decisión, la ex esposa de Chey Tae-won apeló.
Al final, sale de esta prueba con un buen premio de dinero.
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