Las dos aerolíneas acordaron los términos de su matrimonio después de duras negociaciones.
Tras turbulencias de última hora, Lufthansa y Roma han superado sus diferencias sobre el precio final de la venta de ITA Airways al gigante aéreo alemán, poniendo rumbo a una boda largamente esperada.
Los acuerdos sobre las soluciones que se enviarán a Bruselas para garantizar la competencia se han alcanzado a tiempo, anunció el lunes por la noche el Ministerio de Economía italiano. “Se espera con confianza la aprobación final de la Comisión Europea para proceder a la finalización de la transacción”subrayó. “Las condiciones económicas previstas no han cambiado respecto al acuerdo ya firmado” en mayo de 2023, señaló.
La empresa alemana y el Gobierno italiano han respetado así el plazo, fijado para la medianoche del lunes, para enviar a la Comisión Europea el paquete de medidas que deberían garantizar el mantenimiento de la competencia. El ministro de Economía italiano, Giancarlo Giorgetti, acabó firmando el documento negociado con Bruselas, que pedía la transferencia de una serie de franjas horarias aeroportuarias a otras empresas para salvaguardar la competencia.
“Italia no vende su empresa”
El Estado italiano y Lufthansa sellaron en 2023 un acuerdo sobre la entrada del grupo alemán en el capital de ITA Airways, tras años de búsqueda infructuosa de un comprador para su antecesora Alitalia. En virtud de este acuerdo, Lufthansa pretende adquirir inicialmente una participación minoritaria del 41% de la empresa pública italiana por 325 millones de euros, reservándose la opción de aumentar hasta el 100% en el medio plazo.
Según la prensa italiana, Lufthansa había solicitado, finalmente en vano, un descuento de 10 millones de euros en relación con la fase sucesiva que prevé la adquisición de una participación adicional del 49% por también 325 millones de euros. Aprovechando las cláusulas de revisión previstas en el contrato matrimonial, Lufthansa habría invocado una pérdida de valor de ITA Airways prevista en el último trimestre de 2024 para justificar una reducción de precios.
“Italia no vende su empresa” aire, aseguró a la AFP una fuente gubernamental el pasado martes. Ante el impasse sobre el precio de venta de ITA Airways, Giancarlo Giorgetti se había negado una semana antes a firmar el paquete de soluciones destinado a Bruselas, a diferencia de Lufthansa. Cuando los periodistas le preguntaron el jueves sobre una posible cumbre con el director general de Lufthansa, Carsten Spohr, respondió que “sería apropiado”.
En julio, Bruselas dio una primera luz verde condicional a esta unión, pidiendo a las dos empresas restricciones en determinadas rutas para preservar la competencia. La fecha límite para el envío de los últimos documentos se fijó primero para el 4 de noviembre y luego para el 11 de noviembre. En enero, la Comisión Europea abrió un “investigación exhaustiva” sobre la operación, por temor a una posible reducción de la competencia en varias rutas de corto y largo recorrido con origen y destino en Italia.
Dos intentos fallidos
La adquisición por parte de Lufthansa debería permitir al gigante alemán ampliar su acceso al mercado italiano, el tercero de la UE, proporcionando al mismo tiempo a ITA un accionista sólido. Bruselas dio luz verde al despegue del ITA en 2021 y autorizó una financiación de 1.350 millones de euros en fondos públicos, con la condición de que al final acabe valendose por sí misma.
La fusión entre Lufthansa y la aerolínea estatal italiana ha estado plagada de obstáculos. El acuerdo final celebrado con ITA Airways se produce después de dos intentos fallidos de Lufthansa de adquirir una participación en Alitalia, en 2009 y 2019. Una vez más candidato junto al gigante del transporte marítimo italo-suizo MSC en enero de 2022, fue derrotado en el puesto. por el fondo de inversión americano Certares. La oferta de Certares, asociada a Air France-KLM y Delta Air Lines, fue retenida por el ex primer ministro Mario Draghi para negociaciones exclusivas, antes de ser rechazada por su sucesora, Giorgia Meloni, en favor de Lufthansa.
El último obstáculo fue que las negociaciones con la Comisión Europea se prolongaron. Tras la autorización condicional concedida en julio, Lufthansa e ITA Airways esperan ahora su veredicto final.