Fin del proyecto de plataforma eléctrica de alta gama

El fabricante alemán Mercedes-Benz detendrá un proyecto de plataforma dedicado al desarrollo de modelos eléctricos de alta gama, ya que el esfuerzo financiero ya no vale la pena en un momento en que el mercado eléctrico está cayendo.

Inicialmente, el fabricante de automóviles premium quería crear una nueva línea de producción para ensamblar modelos de alta gama con propulsión eléctrica, como la Clase S y el GLE a partir de 2028. Finalmente, la producción seguirá organizándose en una línea “de manera que “es flexible en cuanto a los sistemas de propulsión”, afirmó a la prensa un portavoz del grupo, confirmando una información publicada el lunes por el diario alemán Handelsblatt.

Esto dará lugar a vehículos equipados “tanto con un motor totalmente eléctrico como con un motor de combustión de alta tecnología” y “hasta la década de 2030”, señala esta fuente. El objetivo es “explotar de forma sostenible las ganancias de eficiencia entre la serie nueva y la existente”.

De este modo, en la histórica fábrica de Sindelfingen (suroeste) se seguirán fabricando modelos convencionales y eléctricos de forma flexible en una sola línea.

Según Handelsblatt, dada la actual debilidad de las ventas de modelos eléctricos, el coste financiero que sufragaría la nueva infraestructura dedicada a los modelos eléctricos ya no estaba justificado. El jefe de Mercedes-Benz, Ola Källenius, estimó en febrero que los coches eléctricos e híbridos enchufables de la marca estrella representarán alrededor del 50% de la producción total a finales de la presente década.