Un grupo de familiares de las víctimas del mortífero atentado terrorista cometido a finales de agosto en Barsalogho (Burkina Faso) denunció el “desprecio” del jefe de la junta, el capitán Ibrahim Traoré, y señaló su “responsabilidad”. Más de 400 personas murieron, según el grupo, durante esta masacre perpetrada el 24 de agosto y reivindicada por el Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes, vinculado a Al Qaeda.
En Burkina Faso, la ira no cesa entre los familiares de las víctimas de la masacre de Barsalogho. Reunidos, algunos de ellos denuncian el “desprecio” del líder de la junta, el capitán Ibrahim Traoré, y señalan su “responsabilidad”.
El atentado, perpetrado el 24 de agosto, es el más sangriento que ha conocido Burkina Faso, que lleva casi diez años sufriendo la violencia yihadista, en su historia.
No se han publicado cifras oficiales, pero el Colectivo de Justicia para Barsalogho (CJB), formado por familiares de las víctimas, ha informado de más de 400 muertes.
“Para nosotros, el presidente es y seguirá siendo el principal responsable de la muerte de más de 400 de nuestros familiares. Si los mataron, fue por su culpa”, afirmó el CJB, cuyos miembros prefieren permanecer en el anonimato por razones de seguridad, en un comunicado enviado a la AFP el viernes.
Veinte días después de la tragedia, llamó a “no olvidar a las víctimas de Barsalogho”, calificando el atentado de “grave atentado a la dignidad humana”.
El silencio se califica de “falta grave”
Con AFP
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