Rusia dijo el domingo que sus fuerzas estaban avanzando en el este de Ucrania, y Kiev informó sobre ataques aéreos letales e instó a Occidente a permitirle llevar a cabo más ataques de represalia dentro del territorio ruso.
Moscú ha intensificado sus ataques aéreos en las últimas semanas mientras intenta repeler una importante ofensiva ucraniana en la región rusa de Kursk.
Desde el 6 de agosto, Kiev lleva a cabo una incursión en esta región situada frente a la de Sumy, en el este de Ucrania, con la esperanza, en particular, de crear allí una zona de amortiguación para proteger a su población fronteriza de los ataques aéreos desde Moscú.
Pero un nuevo ataque aéreo ruso mató a dos personas en Sumy.
“Anoche (…) el enemigo lanzó un ataque aéreo contra la ciudad de Sumy. Dos personas murieron y cuatro resultaron heridas, entre ellas dos niños”, anunció el domingo la administración militar de la región en Telegram.
El alcalde de Sumy, Oleksiy Drozdenko, informó que casas y coches fueron destruidos o dañados.
Un ataque con cohetes rusos contra un pueblo cercano a la línea del frente en la región de Donetsk, epicentro de los combates, también mató a dos mujeres, dijo el domingo la fiscalía regional.
Kiev había lanzado su ofensiva en Kursk con la esperanza de obligar a Rusia a redistribuir sus tropas que actualmente avanzaban en el este del país.
Sin embargo, Moscú parece estar intensificando sus ataques, registrando en agosto las conquistas territoriales más importantes en casi dos años.
El ejército ruso reivindicó el domingo la captura de una localidad en el este de Ucrania, donde avanza hacia la estratégica ciudad de Pokrovsk.
– “Objetivos legítimos”-
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