Represión
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La directora, junto con su colega Svetlana Petrïitchouk, fue condenada a mediados de diciembre a seis años de prisión. Un nuevo ejemplo de la implacable represión del Kremlin, respondió por escrito desde su prisión a las preguntas de “Libération”.
Un frío cuartel de una sola planta en el pueblo de Vlasikha, a una hora en coche del centro de Moscú. Un pueblo cerrado donde se encuentran el cuartel general de las Fuerzas de Misiles Estratégicos y el centro de mando central de las fuerzas nucleares estratégicas terrestres de las Fuerzas Armadas de Rusia. Este 16 de diciembre, en el cuartel al que acudieron 60 personas de la capital, entre ellas el premio Nobel de la Paz Dmitri Muratov, hay una sala especial para seguir la retransmisión de las audiencias. Aquí los periodistas siguen los juicios del Tribunal Militar de Apelación, situado detrás de una alambrada de púas en este pueblo cerrado a todos. Sólo se permite la entrada con pases emitidos especialmente para la ocasión.
En la pantalla de control aparecen dos mujeres. Evgenia Berkovitch, 39 años, directora y poeta, con el pelo recogido en una cola de caballo, vestida toda de negro, y la dramaturga Svetlana Petriïtchouk, 44 años, vestida de gris. Llevan casi dos años encarcelados en una prisión de Moscú. El 8 de julio fueron condenados a seis años de prisión por “apología del terrorismo”que la fiscalía afirma haber leído en una habitación, Finist, le clair fauconelaborado por los dos artistas y que, en realidad, denunciaba el yihadismo. La obra, escrita por