Generalmente trabajan en la sombra, sin tener un escaparate bien ubicado, ya sea físico o virtual. Pero durante las vacaciones de Navidad, los creativos artesanos salen de sus talleres para ofrecer sus creaciones a la vista de los transeúntes. La redacción ha hecho una selección de tres direcciones cuyo leitmotiv es, no sólo la pieza única, sino también la originalidad.
En el mercado de Navidad, en uno de los chalets anexos al mercado, se exponen joyas de C de Cha, etiquetadas como eco-responsables. Charlotte, la diseñadora, vive en Penne y trabaja desde casa. Expone durante los mercados de verano, en la costa y en Navidad en la casa de campo. Por lo tanto, es bastante rara la oportunidad de echar un vistazo a su colección con su concepto inusual. Charlotte usa lo que tiene a mano para hacer anillos, aretes, pulseras o collares. Así, las flores de su jardín o sus viejos corchos recortados se convierten en joyas una vez encerradas en resina.
También utiliza arcilla polimérica, a base de cera de abejas, y pigmentos naturales para su línea de colores sólidos. Charlotte también ofrece servicio postventa para evitar, siempre de forma eco-responsable, que sus clientes tiren a la basura sus joyas estropeadas o rotas. Sus precios oscilan entre los 12 y los 35 euros de media.
Flores vintage y pop
Un poco más lejos, en la calle Sainte-Catherine, se encuentra Alexandre Follain, que durante un mes se instaló para vender, en particular, sus creaciones Lego, inspiradas en el retrogaming. Estos objetos coloridos, que rozan la nostalgia, se venden por entre 20 y 30 euros. Alexandre Follain, apasionado del vintage, también ofrece multitud de objetos, de los años 40 a los 50, como nuevos, y expone algunos de los muebles antiguos que le gusta desviar de su primer uso.
Finalmente, para los amantes de las flores que están tristes al verlas desvanecerse en unos días, Olivia y su Flowerpop encontraron la solución. Instalado ahora en una sala de exposición de 300 m², en el 34 bis rue Jeanne-d’Arc, ofrece creaciones florales, por encargo o no, ramos, flores para colocar o iluminadas, coloridas y con un diseño vintage o refinado. Aquí también ninguna flor es igual a otra. Los precios comienzan en 15 euros por tallo y amapola pequeña en maceta. Excepcionalmente, y para las últimas compras, Olivia estará abierta, además de en su horario habitual, el domingo por la mañana.