Los profesores de Geografía tendrán cuatro buenos años por delante, ya que tendrán que explicar, cuando sea posible, los movimientos de la brújula del presidente Donald Trump frente al mapa mundial.
¿Donald Trump ha perdido el rumbo… es decir, el resto de nosotros?
En cualquier caso, su brújula obliga a todos a mirar de nuevo los mapas.
¡Imagínatelo! Llego a un Tim Hortons y encuentro gente en profunda conversación, no sobre los Montreal Canadiens, sino sobre el Canal de Panamá… tema que los dejó absolutamente indiferentes hace unas semanas.
La salsa china se está volviendo demasiado espesa para el gusto de Donald en este canal que conecta los océanos Pacífico y Atlántico, y se plantea volver a tenerla en sus manos.
Groenlandia y nosotros
Con el efecto Trump, Groenlandia también se encuentra en el punto de mira.
El poco sutil político multimillonario, que prestará juramento el lunes, ha expresado el deseo de que este territorio de importancia estratégica sea anexado a los Estados Unidos.
Como también mencionó una anexión de Canadá como 51mi Por cierto, apostamos a que mucha gente en la Tierra, a la que normalmente no le importamos en absoluto, empezó a hablar de ello y a mirar las cartas.
Telerrealidad política
Donald Trump quiere imponer aranceles a los productos canadienses… a pesar de que somos el aliado natural más antiguo de su país.
Trump quiere poner fin a lo que él llama el “engaño trans” y no debería sorprendernos que recibamos refugiados que buscan una sociedad más acogedora.
En cualquier caso, ¡nuestros funcionarios de aduanas estarán muy ocupados!
Trump quiere enviar los sacos de cemento necesarios para completar su famoso muro de la vergüenza en Arizona y Texas.
Trump, Trump, Trump… Este hombre aparecerá en las noticias todos los días.
Sea o no catastrófico para nuestra economía, al menos tendremos la certeza de que nunca será aburrido.