Durante el último Consejo de Ministros, el Jefe del Estado se centró en la política de urbanismo, arquitectura, vivienda y promoción de la vivienda. En este contexto, Abdou Karim Sakho, arquitecto y urbanista, compartió su experiencia sobre los verdaderos desafíos de esta modernización durante una intervención en el programa de entrevistas de Radio Senegal.
Para Abdou Karim Sakho, el principal obstáculo para alcanzar las ambiciones gubernamentales, en particular el programa de 100.000 viviendas sociales, sigue siendo la tierra.
“Antes de hablar de arquitectura, primero debemos hablar de territorio. Hoy, en Senegal, la tierra plantea un problema. Para construir cien mil viviendas, primero se necesitan terrenos urbanizados, una muy buena planificación y medios sustanciales para lograrlo. Desde 2019, la gente ha estado hablando de ello, pero hasta ahora la gente se está demorando. Realmente no hemos llegado al final de nuestros esfuerzos. »
Según el urbanista, una planificación rigurosa y los recursos adecuados son esenciales para realizar este ambicioso proyecto. Abdou Karim Sakho recordó el patrimonio arquitectónico de barrios como SICAP, Point E o Fann, construidos durante la época colonial. Estas áreas se distinguen por su distribución armoniosa y el cumplimiento de las normas. Hoy en día, la urbanización galopante, marcada por una alta densidad demográfica y una proliferación anárquica de edificios, está poniendo a prueba la armonía urbana.
“Una revitalización es posible, pero hay que contextualizarla. En la época del presidente Léopold Sédar Senghor, Dakar no tenía tanta población ni tanto desorden. Tenía la libertad de construir lo que quisiera. Pero con voluntad colectiva podemos hacerlo mejor que lo que está sucediendo en otros lugares. »
Preguntado sobre la legislación en materia de urbanismo y construcción, Sakho afirmó que Senegal tiene una normativa que se encuentra entre las mejores de África. El problema está en su aplicación.
“No es un problema de legislación. Tenemos las mejores regulaciones de África. El problema es cómo lograr que todos cumplan estas normas. Hoy en día, la gente construye sin permisos, sin consultar los planos de un arquitecto. Esto plantea un problema de educación de masas. Los ciudadanos deben respetar la administración y seguir los procedimientos. »
La modernización de los municipios senegaleses requiere no sólo una gestión óptima del territorio, sino también una mayor concienciación de la población sobre el respeto de las normas de planificación urbana. Para el arquitecto, este paso es crucial para alcanzar el objetivo de una urbanización armoniosa y sostenible.
Si se supera el desafío del territorio y del cumplimiento de las normas, Senegal podrá aspirar a una arquitectura moderna y funcional, preservando al mismo tiempo el patrimonio urbano que lo hace único. La visión presidencial, combinada con la movilización de técnicos y ciudadanos, podría remodelar el rostro de las ciudades senegalesas para hacerlas más atractivas y habitables.