El gobierno luxemburgués trabaja para reducir las repercusiones de la interrupción de la navegación en el Mosela sobre el puerto de Mertert y sus empresas.
La ministra de Movilidad, Yuriko Backes, y el ministro de Economía, Lex Delles, visitaron el martes el puerto de Mertert. Pudieron discutir con los operadores portuarios las consecuencias del accidente ocurrido el 8 de diciembre en el Mosela alemán. Un barco chocó contra la puerta de la esclusa de Müden (Renania-Palatinado) cuando aún no estaba completamente abierta. Las reparaciones durarán probablemente al menos hasta finales de marzo, lo que imposibilitará el transporte de mercancías por el Mosela, tanto hacia el Rin como hacia Luxemburgo, el Sarre y Francia.
En el Gran Ducado, el puerto fluvial de Mertert y sus clientes son las principales víctimas de esta interrupción del tráfico. Y entre los sectores económicos cuya actividad transcurre por la plataforma logística trimodal, donde confluyen el transporte fluvial, ferroviario y por carretera, la industria siderúrgica está a la cabeza. Cada año, la empresa Luxport, principal operador del puerto, envía 380 barcazas, de las cuales 200 son de acero, es decir, 400.000 toneladas de acero. Otros bienes que llegan a Luxemburgo son materiales de construcción, petróleo y, en menor medida, cereales.
Normas adaptadas, paro parcial…
Para mitigar las consecuencias para las empresas afectadas y mantener operativas las cadenas de producción, el gobierno está analizando varias medidas, en particular la adaptación de las normas de transporte por carretera. “Nuestra prioridad es apoyar a los sectores afectados, en particular facilitando el cambio modal hacia el ferrocarril y la carretera y considerando una relajación de los horarios de conducción de los vehículos pesados para mitigar el impacto en la cadena logística”, anunció Yuriko Backes. Este trabajo debe realizarse conjuntamente con la CFL: “Debemos ver con ellos cómo podemos llegar allí y anticiparnos lo más posible”. Todo esto, además de una buena logística en el puerto, debería reducir los daños para las empresas.
La segunda solución propuesta por el gobierno es orientar a las empresas hacia el sistema de paro parcial en caso de fuerza mayor. El Comité Económico reunido el lunes ya aceptó tres solicitudes en este sentido. “Resulta ser una herramienta muy adecuada para afrontar situaciones excepcionales como la que viven actualmente”, subrayó Lex Delles. El desempleo parcial ayuda a mantener los puestos de trabajo. Y durante este período, el Estado reembolsa a la empresa el 80% de los salarios que normalmente perciben los empleados afectados.
Para evacuar a los 70 barcos varados en el Mosela tras este incidente, se instaló una esclusa de emergencia en Müden. “En 12 horas, 9 de los 70 barcos fueron evacuados a través de la esclusa. Creo que es una noticia realmente positiva”, se alegra Yuricko Backes. Esta noticia da esperanzas de que todos los barcos sean evacuados antes de fin de año.