En Sudáfrica, los líderes económicos y regionales están aumentando los llamados a una cooperación profunda con Marruecos, a menudo citado como modelo para el despegue económico en África. Estas demandas llegan en un contexto marcado por una creciente presión sobre el Congreso Nacional Africano (ANC), el partido gobernante, para que reconsidere su política diplomática hacia Rabat.
En el Foro Africano de Inversiones (AIF), celebrado en Rabat la semana pasada, Stembiso Dlamini, director general de la Autoridad de Turismo de Gauteng, elogió los espectaculares avances de Marruecos en sectores estratégicos como el turismo y la industria del automóvil. Abogó por inversiones conjuntas, intercambios de habilidades y asociaciones centradas en la energía renovable y la sostenibilidad ambiental, que se encuentran entre las principales prioridades de la provincia sudafricana de Gauteng.
Por su parte, Saki Zamaxka, director general de la Agencia de Crecimiento y Desarrollo de Gauteng, destacó posibles sinergias entre ambas economías. “La experiencia marroquí en energías limpias, servicios financieros e industrialización puede aportar un importante valor añadido a nuestra región”dijo. También mencionó los beneficios esperados de alianzas fortalecidas para la creación de empleo y el desarrollo de infraestructura.
Lebogang Maile, Ministro de Desarrollo Económico de Gauteng, destacó por su parte la importancia de la cooperación transnacional. “Es imperativo construir relaciones sólidas que satisfagan las demandas de equidad social y sostenibilidad ambiental generando al mismo tiempo prosperidad común”declaró.
Tensiones internas dentro del ANC
Estas iniciativas económicas coinciden con un debate cada vez más animado en el Congreso Nacional Africano sobre la política a adoptar hacia Marruecos. Recientemente tuvieron lugar protestas frente a la sede del ANC en Johannesburgo, desafiando lo que se considera una postura diplomática demasiado rígida. Teboho Maake, figura destacada de estas movilizaciones, instó a los dirigentes sudafricanos a reconocer el papel histórico de Marruecos en el apoyo a la lucha contra el apartheid.
Oportunidades estratégicas en el contexto del reposicionamiento africano
Marruecos, que se ha consolidado como un centro regional en sectores como el automóvil, la energía limpia y el desarrollo financiero, está atrayendo cada vez más la atención de los responsables políticos sudafricanos. Con un marco regulatorio de incentivos e inversiones masivas en infraestructura, el reino ofrece perspectivas considerables para asociaciones estratégicas. Para Sudáfrica, un acercamiento con Rabat también podría ayudar a diversificar sus relaciones económicas en África y aliviar las incertidumbres vinculadas a sus socios tradicionales. Si las diferencias políticas siguen siendo un obstáculo, la creciente presión de los círculos económicos y de los activistas bien podría iniciar un punto de inflexión decisivo en las relaciones entre Pretoria y Rabat.