Mientras la caída del gobierno debilita a Francia a escala europea, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Layen, llega a Uruguay para poner fin a 20 años de negociaciones y firmar el acuerdo de libre comercio con el Mercosur. En RMC, Marine Tondelier se declara “disgustada” y señala la responsabilidad de Emmanuel Macron.
Bruselas quiere poner fin este viernes al polémico acuerdo de libre comercio con Mercosur. Ursula von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea, aterrizó este jueves en Uruguay, en Montevideo, para reunirse con los países de América del Sur y poner fin a las negociaciones. Está decidida a cerrar este expediente de 20 años, que se ha vuelto explosivo en los últimos meses con la ira de los agricultores franceses y el cambio de opinión de Emmanuel Macron. De hecho, durante una llamada telefónica el jueves por la mañana, el Presidente de la República “reiteró” que una firma es “inaceptable tal como está”.
Pero Bruselas bien podría torcerle el brazo a Francia. La meta de un acuerdo está a la vista, recordó Ursula von der Leyen. Los diplomáticos franceses pueden advertir a Bruselas y reafirmar que Francia todavía puede salir adelante, de hecho, con la censura, el país está cada vez más debilitado con estos socios, según el especialista en Europa Patrick Martin-Genier.
“Por supuesto, esto es un elemento agravante para Francia. En Bruselas ya no entendemos lo que está pasando en Francia y Ursula von der Leyen presionará sus peones, especialmente para Alemania. Es evidente que Alemania está presionando para que este acuerdo se firme lo antes posible”, explica.
Por lo tanto, es poco probable que el jefe de la Comisión Europea tenga en cuenta la última llamada telefónica de Emmanuel Macron, este jueves, para reiterar su oposición y recordarle que el acuerdo condenaría a los agricultores.
“Qué desaire para Emmanuel Macron”
Invitada este viernes a RMC, la ecologista Marine Tondelier lo considera sobre todo un fracaso de Emmanuel Macron y sus aliados políticos.
“Es escandaloso. Qué desaire para Emmanuel Macron y su diplomacia, cree. Este es un tema que hemos estado luchando durante años. Desde el principio, los ambientalistas han estado junto a los agricultores para luchar contra este Mercosur como los tratados siguientes, desde José Bové en Seattle. Y cuando vemos que el caos político que están provocando en Francia permite que sus supuestos aliados europeos los pisoteen, porque eso es lo que está sucediendo, es un desaire para ellos. Ya no hacen que nadie los respete. Este ya era el caso en Francia y ahora vemos que también es el caso en Europa. Francia ha perdido todo su poder, todo su esplendor a nivel internacional y ya no pesa nada. Y serán los agricultores franceses quienes pagarán el precio. Estoy disgustado”.
Aún existen otras palancas para frenar el proyecto que Ursula van der Leyen traerá desde Uruguay al Consejo Europeo y al Parlamento en Bruselas. Los dos órganos darán su opinión en los próximos meses para firmar y ratificar el texto. Pero Francia todavía parece demasiado aislada como para descarrilar realmente el acuerdo.
Guillaume Descours con Nicolás Traino