Chad rompió su acuerdo de cooperación en materia de defensa con Francia porque era “obsoleto” y ya no correspondía a sus imperativos geopolíticos y de seguridad, declaró el presidente Idriss Déby.
Después de haber estado luchando contra una insurgencia yihadista durante más de una década, Chad se benefició del apoyo de las tropas francesas y estadounidenses desplegadas en el Sahel.
Los últimos militares franceses podrían verse obligados a abandonar el país tras la salida prevista de las tropas estadounidenses en abril. Francia ha tenido presencia militar en Chad desde la independencia del país en 1960.
Según el Presidente Déby, que habló públicamente sobre el tema por primera vez, el acuerdo con Francia ya no aportaba ningún valor añadido militar al Chad.
“Este acuerdo se firmó en otro momento, con diferentes actores de ambas partes y en un contexto completamente diferente. Con el tiempo, este acuerdo se ha vuelto obsoleto”, explicó el domingo por la noche durante un discurso.
“Esta ruptura forma parte de nuestro deseo de construir un ejército chadiano más autónomo, más comprometido y más responsable en la defensa de la patria”, añadió.
Sin embargo, subrayó que Chad seguía abierto a la cooperación con todos los socios, incluida Francia.
“Esta decisión no se tomó a la ligera”, aseguró el presidente chadiano. “Es el resultado de una reflexión profunda y de una evaluación cuidadosa y responde a un compromiso contraído con el pueblo chadiano”.
En los últimos años, Francia se ha visto obligada a retirar sus soldados de Mali, Burkina Faso y Níger tras varios golpes militares en África occidental y un creciente sentimiento antifrancés.
Esta retirada de las tropas occidentales de África contrasta con la creciente influencia de Rusia en el continente, en particular con la presencia de mercenarios rusos que apoyan a los gobiernos militares del Sahel contra los grupos yihadistas.
(Informe Mahamat Ramadane, escrito por Bate Felix y Jessica Donati, versión francesa Etienne Breban, editado por Sophie Louet)
