Sabemos que los trabajadores transfronterizos ocupan un lugar importante en Luxemburgo. Y a medida que pasan los años, su número aumenta. INSEE, el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos, ha presentado su último estudio sobre los trabajadores transfronterizos franceses, revelando que los viajes hacia y desde el Gran Ducado se han vuelto “mucho más largos” que antes.
En comparación con Suiza, Alemania y Bélgica, el instituto constata una fuerte evolución del número de viajeros transfronterizos franceses hacia Luxemburgo (+55,5%) desde 2010. En esa fecha, 66.100 habitantes del Gran Este se unían al Gran Este. Ducado. En 2021, serán 102.800, según cifras del instituto francés. Cabe señalar que en 2024, 124.000 trabajadores transfronterizos franceses cruzarán la frontera, informó recientemente la Inspección General de la Seguridad Social.
La distancia entre el hogar y el trabajo también tiende a aumentar con el paso de los años. Estos trabajadores transfronterizos franceses que han elegido el Gran Ducado trabajan a aproximadamente 41,7 kilómetros de su casa (+1,5%), un viaje 2,5 veces más largo que el de los trabajadores no transfronterizos.
En comparación con Suiza, Bélgica o Alemania, Luxemburgo es el país donde los trabajadores transfronterizos recorren más kilómetros para trabajar: una cuarta parte de ellos recorren más de 50 km. “Quienes trabajan no sólo cruzan la frontera, sino que un gran número sube a la capital, lo que genera más desplazamientos y tiempos de viaje”, explica Rémi Charrier, subdirector del departamento de Estudios y Difusión del Insee. La diferencia con Basilea, por ejemplo, es que esta gran ciudad se encuentra directamente en la frontera con Suiza.
El viaje a Luxemburgo, a menudo realizado en transporte público, es cada vez más largo. En el estudio, los viajeros transfronterizos que trabajan en Bélgica y Alemania (97% y 96%) eligen el coche más que aquellos que van a Luxemburgo (83%). Los franceses son los que más utilizan el transporte público hacia el Gran Ducado (17%).
Viajes más largos… y más tráfico. Restricciones de movilidad aceptadas por los viajeros transfronterizos que dan como resultado una huella de carbono mayor que otras. Según el estudio, un trabajador transfronterizo francés genera 1,6 toneladas de CO2 equivalente, frente a las 0,7 de un trabajador no fronterizo. Para quienes trabajan en Luxemburgo y Alemania, es mucho más: se necesitan 1,7 toneladas de CO2 equivalente, o más del doble. “Cada vez venimos más lejos para trabajar en Luxemburgo”, explica Rémi Charrier.
¿Ya nos sigues en WhatsApp?
Suscríbete a nuestro canal, activa el pequeño ???? y recibirás un resumen de noticias todos los días en temprano en la noche.