Un accidente en el marco de una actividad privada y familiar es lo que ocurrió este domingo 23 de junio a última hora de la tarde en el lago Cazaux, a caballo entre la Gironda y las Landas, y en la localidad de Teste-de-Buch. Un niño de unos doce años murió durante una actividad acuática. Remolcado por una boya por una embarcación conducida por un miembro de su familia, cayó al agua alrededor de las 17.00 horas. Mientras maniobraba para rescatarlo, el conductor de la embarcación atropelló al niño, que desapareció en el lago.
Murió a causa de sus heridas
Llamados inmediatamente, los bomberos activaron un importante dispositivo para encontrarlo: equipos náuticos, nadadores y un helicóptero. El cuerpo de la víctima fue encontrado luego de casi 2 horas de búsqueda, fallecido a causa de sus heridas.
Por ahora, el conductor ha sido interrogado brevemente por la policía para determinar las circunstancias precisas de la tragedia. Están previstas otras audiencias y la fiscalía ha abierto una investigación. En particular para establecer si se han respetado las normas de seguridad impuestas por este tipo de actividad privada. Un raro accidente que molestó a los presentes en la playa. Otro niño estuvo presente en la boya durante esta actividad.