Nueva campaña de invierno para Restos du Cœur de Haute-Corse que, como cada año, se prolongará hasta mediados de marzo.
Durante las dos últimas campañas de invierno y de verano, se entregaron 198.000 comidas a los beneficiarios de Alta Córcega, es decir, 800 hogares en invierno y 750 en verano, cifra que no deja de aumentar.
Afectados por una crisis financiera sin precedentes, los restaurantes, tanto a nivel nacional como local, tuvieron que decidir el año pasado rechazar a ciertos posibles beneficiarios. Una vez superada esta crisis, para esta nueva temporada se han elevado los restantes umbrales que determinan el acceso o no a los Restaurantes.
En el centro de distribución de Bastia participan cerca de una treintena de voluntarios habituales, un número que sigue siendo insuficiente.
Escuchamos a Françoise Collomb-Luciani, presidenta de Restos du Cœur de Haute-Corse.
Las familias, y más concretamente las monoparentales, están en el centro de las prioridades esta temporada. A nivel nacional, uno de cada cuatro beneficiarios es un padre que cría solo a uno o más hijos.
Es el caso de esta madre, acompañada de su hija pequeña, que vino este martes a hacer sus compras a Restos du Cœur. Al no tener otra opción que ser madre y ama de casa, tiene que lidiar con bajos ingresos económicos, principalmente subsidios y asistencia social.
Inevitablemente, con el aumento del coste de la vida, la ecuación se vuelve cada vez más difícil de resolver, especialmente durante períodos cruciales como el inicio del año escolar o las vacaciones. Esta madre subraya la importancia capital de Restos du Cœur para seguir comiendo cuando tiene hambre.
Lo escuchamos.