Utilizando los datos más recientes de la Encuesta de Seguridad Financiera (ESF) publicada por Statistics Canada, el economista Geoffroy Boucher señala que los activos familiares, es decir, la riqueza acumulada a lo largo de la vida, han evolucionado de manera muy desigual desde 2019.
Entre 2019 y 2023, el valor de la riqueza de las familias quebequenses aumentó de 2.417 mil millones de dólares a 3.008 mil millones de dólares.
Sin embargo, las familias del 10% más rico captaron por sí solas el 32,3% de este aumento.
En cuanto a las familias del 40% más pobre, sólo captaron el 11,2% del crecimiento de la riqueza.
El sector inmobiliario como fuente de enriquecimiento
Según el economista, el aumento de la riqueza familiar desde la pandemia se explica en gran medida por el marcado aumento del valor de los activos inmobiliarios.
En Quebec, el sector inmobiliario es responsable del 59% del aumento del patrimonio familiar total. El valor total de los activos inmobiliarios aumentó de 980 mil millones de dólares en 2019 a 1,352 mil millones de dólares en 2023 (en dólares constantes).
En comparación, les siguen a mucha distancia los RRSP (16%) y los vehículos y otros activos no financieros (14%), respectivamente, en segundo y tercer lugar.
Para Geoffroy Boucher, el importante crecimiento del sector inmobiliario corre el riesgo de ampliar las desigualdades entre propietarios e inquilinos.
El peso de la deuda hipotecaria
Si el valor de los bienes de las familias quebequenses aumentó un 23% entre 2019 y 2023, el de las deudas, que constituyen la segunda dimensión de la riqueza, aumentó un 10%, observa el economista.
Según él, el aumento de las obligaciones financieras de las familias se debe al aumento de la deuda hipotecaria, cuyo valor total aumentó de 288 mil millones de dólares en 2019 a 324 mil millones de dólares en 2023 (en dólares constantes).
A Quebec le va peor
En 2023, recuerda el economista, el Observatorio publicó un primer retrato de las desigualdades de riqueza en Quebec, que demostraba, en particular, que las desigualdades de riqueza eran mucho más pronunciadas que las desigualdades de ingresos.
Además, este retrato también destacó el hecho de que, si bien Quebec se posiciona como la provincia menos desigual en términos de ingresos, la provincia tiene peores resultados en términos de patrimonio, ubicándose detrás de Ontario, Columbia Británica y las provincias del Atlántico.
Desigualdades subestimadas
Para Geoffroy Boucher, parece que estas desigualdades también están subestimadas, y los datos del FSE subestiman la importancia de la riqueza que se encuentra en la parte superior de la distribución.
De hecho, indica, el responsable del presupuesto parlamentario ha observado problemas de subdeclaración o ausencia de datos entre las familias con activos muy elevados dentro del FSE.
“Un dato de mejor calidad arrojaría luz más justa sobre la distribución de la riqueza en Canadá. Las desigualdades de activos constituyen un indicador esencial de la situación socioeconómica de las familias en Quebec y Canadá. También desempeñan un papel vital en la reproducción de la posición social de una generación a otra”, concluye el economista.
