El Tribunal de Cuentas publicó este martes 12 de noviembre un informe sobre la educación superior y la investigación en los territorios de ultramar. En su sección dedicada a la Universidad de las Indias Occidentales, el informe no hace concesiones. Destaca numerosas deficiencias y debilidades en términos de oferta de formación, investigación y gestión financiera de la universidad.
Las palabras son duras para la Universidad de las Antillas, en el informe publicado este martes 12 de noviembre por el Tribunal de Cuentas sobre la educación superior y la investigación en los Territorios de Ultramar. Todos los territorios están sujetos a una publicación diferenciada y detallada. En la parte relativa a las Antillas, el Tribunal examina la oferta formativa, la investigación y por supuesto la gestión y organización de la universidad. Y los resultados son muy críticos.
Así, el informe señala “una oferta formativa completa pero adolece de un déficit de atractivo, gestión y rendimiento”. La oferta es muy generalizada con tasas de éxito reducidas y el mantenimiento de una formación poco atractiva. El informe también señala una brecha entre las ambiciones mostradas para las acciones internacionales y el potencial de cooperación a nivel del Caribe. Sobre todo porque la Universidad de las Indias Occidentales, con sus cinco campus en el Caribe, está bien clasificada a nivel mundial, lo que no es el caso de la Universidad de las Indias Occidentales, que solo aparece en el ranking de Shanghai en la materia de ecología en 2023 y 2024, gracias a en particular a las publicaciones de la UMR Boréa (Biología de Organismos y Ecosistemas Acuáticos). El Tribunal también señala que la investigación es poco visible y carece de perspectiva.
Otro punto importante del informe, la gestión de la Universidad que tiene muchas debilidades y que hay que reforzar. En este capítulo se cuestiona la distribución de créditos y empleos entre los centros de Guadalupe y Martinica. También se destaca la falta de transparencia. Las numerosas deficiencias e inexactitudes de la documentación financiera reflejan una debilidad del instrumento financiero y afectan a la calidad de las cuentas. Ciertos métodos se consideran ilegales, como por ejemplo un presupuesto reservado al presidente.
Una parte del presupuesto (2%), es decir, unos 100.000 euros al año, está reservada al presidente, sin que se produzca un debate sobre su utilización durante el examen del presupuesto o de la cuenta financiera. Este sobre se utilizaría para financiar los proyectos prioritarios del presidente. La universidad se compromete a derogar esta disposición durante el curso académico 2023-2024.
Extracto del informe del Tribunal de Cuentas sobre la UA
En cuanto a las reacciones, en Guadalupe, el Presidente Michel Geoffroy toma nota de este informe que considera “lúcido” sobre la situación de la Universidad. Para él, el informe es una especie de auditoría que denuncia las debilidades pero también señala las mejoras después de 9 años de crisis en la Universidad.
Michel Geoffroy, presidente de la Universidad de las Antillas
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©Ronhy Malety – Guadalupe la 1ère
Para el representante de los estudiantes, elegido miembro de la junta directiva, Allan Colonnette, aún queda mucho por hacer, en particular para el sector STAPS del campus de Fouillole, en Guadalupe.
Allan Colonnette, representante estudiantil elegido para la CA
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©Ronhy Malety – Guadalupe la 1ère