Preguntamos al Sr. Fabrice Rigoulet-Roze, prefecto de la región Pays de la Loire; al señor Renaud Gaudel, fiscal de Loira Atlántico, así como a las autoridades públicas de cerrar esta cría de sufrimiento en Treillières.
Han pasado años desde que Más de 45 caballos, 80 perros y gatos, de un criador de la ciudad de Treillières, en Loira Atlántico, sufren abusos y abandono. Un solo ganadero sin recursos materiales ni humanos, completamente abrumado por la situación que ya no para y que ya no ve el sufrimiento que inflige.
Solicitamos la verificación e identificación según las leyes vigentes de todos los animales ubicados en los municipios de Treillières, Héric, Grandchamp-des-Fontaines y Vigneux de Bretagne.
Los caballos, esqueléticos, no tienen suficiente pasto. La mayoría están en barbecho o boscosos, con cercas inseguras y sin suficiente comida ni agua. Algunos están amontonados en pequeñas áreas cubiertas de escombros y barro.
Debido a la falta de recursos, regularmente se escapan y deambulan por las carreteras. La policía municipal o los vecinos intervienen entonces para evitar accidentes que inevitablemente ocurrirán algún día. Para evitar obviamente que escapen, se les encuentra atados a un árbol, a una valla o incluso encerrados en cajas desmontables sin basura, agua ni heno.
Cada año nacen y viven potros en estas condiciones. Algunos no sobreviven. Los cadáveres quedaron tirados en el suelo hasta que los vecinos, molestos por el olor, contactaron con la gendarmería.
Los gatos se quedan solos, sin cuidados a pesar de las lesiones, sin agua potable ni comida. Tienen miedo de los humanos y casi no están acostumbrados a ellos. Decenas de perros pequeños deambulan entre la basura acumulada o son encerrados con sus nuevas camadas en un coche al costado de la carretera.
Desde hace más de un año, las denuncias de los ciudadanos y los tres decretos prefecturales visibles en Internet por incumplimiento de la ley en materia de cría de perros no han surtido efecto. Tampoco el artículo del periódico Ouest France del 6 de abril de 2024, que describe perfectamente la situación.
El DDPP no ha hecho nada concreto hasta la fecha. Las asociaciones aún no han presentado denuncia. Continúan las reproducciones y ventas.
El sufrimiento de todos estos animales es interminable.
Hoy damos la voz de alarma para que las autoridades públicas competentes actúen y cierren la finca.
Solicitamos expresamente la retirada de todos estos animales y que se imponga a este criador la prohibición de tener animales.