Un nuevo paso antes de la inauguración de la catedral. Este miércoles 6 de noviembre fue presentado el nuevo santuario relicario destinado a albergar la Corona de Espinas de Cristo.
Este miércoles 6 de noviembre fue presentado a la prensa el nuevo santuario relicario destinado a albergar la Corona de Espinas de Cristo en la catedral de Notre-Dame de París.
Resueltamente moderno, este “relicario de pared” contemporáneo, realizado con madera de cedro y bloques de vidrio que forman un halo, “contendrá la corona de espinas que cubrió la cabeza de Jesucristo en el momento de su Pasión”, explicó Guillaume Normand, vice-presidente. rector de la catedral de Notre-Dame de París, durante su presentación.
El relicario tiene la forma de un gran retablo (3,60×2,60m) de madera de cedro “que es la madera de la Cruz”, engastado con espinas de bronce insertadas en muescas cada vez más anchas, destacando la catedral y la diócesis en un dossier de prensa.
“La inspiración fue realizar un gran retablo de madera de cedro en el que se incrusta un halo de cabujón de vidrio, en medio del cual se presenta la reliquia de la corona”, explicó Sylvain Dubuisson, el diseñador.
“Los símbolos de la Pasión”
La Corona de Espinas, llamada Santa Corona o Corona de Cristo, es en la tradición cristiana la corona que se colocó sobre la cabeza de Cristo antes de su crucifixión.
“Estos son los símbolos de la Pasión”, añadió Sylvain Dubuisson, subrayando que las espinas “son la representación del sufrimiento en la propia corona”.
La Corona de Espinas se mostrará en una media esfera de color azul intenso ubicada en el centro, según este documento.
El santuario relicario “dice, por su majestuosidad y su magnitud, que estamos ante un objeto importante”. “Llama la atención, pero no por sí misma, para centrarnos en la presencia de esta corona de espinas”, explica Guillaume Normand.
Una vitrina rota durante el incendio.
La tarde del incendio, el 15 de abril de 2019, estas reliquias, que se encuentran entre las más sagradas para los católicos, fueron evacuadas de la catedral. Pero para llegar al cofre de la Corona de Espinas, los bomberos tuvieron que romper la vitrina que la encerraba.
Este gran santuario-relicario, fabricado por los Ateliers Saint-Jacques & Fonderie de Coubertin, se instalará “en el eje de la catedral” y “no será visible desde el exterior, sino como algo que se descubrirá en el momento de pasear por el interior de la catedral”. “, añadió el vicerrector.
Llegará “a finales de noviembre” y durante la semana inaugural, tras la inauguración de la catedral los días 7 y 8 de diciembre, “este santuario relicario será bendecido por el arzobispo y recibirá la propia corona de espinas”, añadió. .