El ejército suizo debe hacer esfuerzos para combatir mejor la discriminación y la violencia sexualizada. Anunció medidas el jueves. Nada menos que el 81% de las personas encuestadas en un estudio afirman haber experimentado comentarios y bromas sexistas.
“Hay que hacer más”, “todavía hay esfuerzos por hacer”, “la necesidad de actuar es evidente”: el ejército no se anda con rodeos tras conocer los resultados de un estudio sobre la discriminación y la violencia sexualizada por razón de género y/o u orientación sexual en el ejército suizo.
Estos resultados concluyen que esta discriminación y violencia está generalizada en el ejército. Las minorías como las mujeres, las personas no heterosexuales y las personas transgénero son un objetivo especial. No se trata de casos individuales, señala el informe: la discriminación y la violencia sexualizada están estrechamente vinculadas a la cultura empresarial del ejército.
Seis campeones de acción
Ante esta observación, el ejército está anunciando medidas complementarias a su estrategia de diversidad, con el fin de fortalecer la protección de los soldados y acelerar el cambio cultural dentro del ejército. El estudio concluye que es necesario multiplicar las imágenes del soldado típico para reconocer a todos los soldados en su diversidad, así como establecer una cultura corporativa inclusiva.
Las medidas se dividen en seis campos de acción. Los tres primeros entran en la categoría de prevención. Esto implica detectar y prevenir rápidamente comportamientos desviados, desarrollar la capacidad de detectar estos comportamientos, concienciar a los militares sobre la discriminación y la violencia sexualizada, así como capacitarlos para luchar mejor contra ellos.
El cuarto ámbito de acción tiene como objetivo fortalecer los derechos de las víctimas y proteger a los testigos. El quinto debería permitir mejorar el procedimiento, en particular agilizándolo y haciéndolo más accesible. También implica registrar todos los expedientes disciplinarios por actos de discriminación o violencia sexualizada.
En el último campo de acción, el ejército debe colaborar más intensamente con otras organizaciones o servicios externos especializados para intercambiar conocimientos y experiencias.
“Fenómeno de autoselección”
Desde 2023, el ejército se ha comprometido con una estrategia de tolerancia cero. Ya ha dado los primeros pasos, en particular creando un servicio especializado “Mujeres en el ejército y diversidad”.
El estudio encargado al instituto de investigación YouGov Suiza forma parte del paquete de medidas. Muestra que muchos militares ya están comprometidos con la igualdad y la protección contra la discriminación: el 78,4% de los encuestados indica que la estrategia de tolerancia cero del ejército se aplica, al menos en parte y a veces de forma muy sistemática.
Se invitó a participar en la encuesta a 2.085 militares y 1.869 militares. Sólo 1.126 personas (764 mujeres y 362 hombres) respondieron de forma anónima y voluntaria, entre enero y marzo de 2023.
Para explicar la participación relativamente alta de mujeres y personas queer, el informe habla de un “fenómeno de autoselección”. Esto significa que es común que las personas que participan en encuestas estén particularmente interesadas en el tema que se está discutiendo.
Una “cultura virilista”
Después de haber realizado un cuestionario a 300 militares, Stéphanie Monay, doctora en ciencias políticas y autora de una tesis sobre el lugar de la mujer en el ejército suizo, señala en el Foro que “la cultura institucional militar suiza está muy marcada por esta actitud virilista y machista”. cultura y que la discriminación y el sexismo son algo muy común en el entorno militar.
Desde la llegada de Viola Amherd al frente del Departamento Federal de Defensa, Protección Civil y Deportes (DDPS), “vemos que hay un deseo de interesarse realmente por este compromiso de las mujeres militares y de interesarse por su experiencia muy concreta y la discriminación que pueden experimentar”, concluye.
ats/otros