Dakar, 2 mayo (APS) – El Colectivo de Mujeres Africanas contra la escisión y la violencia vinculada a las tradiciones organizó, el jueves en Dakar, una manifestación para decir no a un proyecto de texto que podría legalizar una vez más la escisión, en Gambia, donde esta práctica prohibido desde 2015.
Esta propuesta fue presentada oficialmente el 4 de marzo por el parlamentario gambiano Almameh Gibba.
”Mientras las mujeres de todo el mundo se movilizan para decir no a la medicalización de la escisión, mientras el 6 de febrero celebramos el día mundial contra la escisión, (…) nos enteramos con asombro de que el parlamento de Gambia examina nuevamente un texto que legaliza la escisión. Invitamos a todas las mujeres del mundo a unirse a nosotros en la lucha contra la derogación de esta ley”, declaró Naky Sy Savané, presidenta del Colectivo.
“Rechazamos categóricamente cualquier intento de legalizar esta práctica inhumana en cualquier parte del mundo. ¿En nombre de qué torturamos los cuerpos de las mujeres? ¿En nombre de qué religión? ¿Qué imperativo de salud? ¿Mutilamos a las mujeres porque les tenemos miedo, a su sexualidad y para servir al ego de los hombres? Los cuerpos de las mujeres ya no deben utilizarse para subyugarlas”, añadió Madame Savané.
El colectivo que impulsa este encuentro está formado por la Unión de Mujeres del Mundo/GAMS Sud, la plataforma global de mujeres emprendedoras de Senegal, la Asociación de Actrices Africanas de la Imagen, la Asociación del Festival Internacional de Cine de Mujeres de Bamako, la Asociación de Mujeres de la Imagen de Mali, la Asociación Fuerzas para el Empoderamiento de las Mujeres Africanas y la Marcha Mundial de las Mujeres.
El objetivo del colectivo es estar en “primera línea” en la lucha contra la escisión y todas las formas de violencia vinculadas a las tradiciones, así como en la lucha contra las “consecuencias devastadoras” de esta práctica para las mujeres y las niñas, subrayó su presidente.
Naky Sy Savané pidió a los gobiernos que intensifiquen sus esfuerzos para erradicar definitivamente esta “forma extrema de violencia machista”.
“Taburetes en mano, asediemos a la Asamblea de Gambia y a todos los órganos políticos del mundo contra decisiones criminales contra nuestras niñas”, dijo.
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