el municipio de Chevigny-Saint-Sauveur invita a los residentes a denunciar a los autores de vertederos ilegales

Basta dar una vuelta por la ciudad de Chevigny-Saint-Sauveur (Côte-d’Or) para darse cuenta del fenómeno. En los últimos meses no han faltado ejemplos: vertidos ilegales de objetos voluminosos, residuos de todo tipo, frigoríficos o sofás abandonados en la acera. En Chevigny-Saint-Sauveur, que tiene 11.000 habitantes, la policía municipal está persiguiendo a los autores de estos actos. Descortesía que exaspera al máximo al alcalde (LR) Guillaume Ruet. A partir de ahora, el municipio lanza sistemáticamente solicitudes de testigos.

En cada vertedero ilegal, una pancarta invita a los vecinos a denunciar a quienes abandonan sus residuos en la vía pública. Desde el pasado mes de abril se han registrado una quincena de vertederos ilegales. En la mitad de los casos, los autores del delito fueron identificados tras una denuncia, a menudo gracias a mensajes o fotografías tomadas por los vecinos. Para justificar su medida, el municipio destaca el considerable coste que generan los vertederos ilegales: 30.000 euros al año, pagados por la comunidad, para retirar estos residuos.

Mire el informe completo en el vídeo de arriba.