Un mes después del ataque a la joven Samara cuando salía de su colegio, la investigación administrativa absuelve el establecimiento pero señala con el dedo las cuentas “Fisha”… un término de las redes sociales que significa “mostrar a alguien” y burlarse de él. . ¿Cuáles son estas cuentas y cómo luchar contra ellas? Europa 1 hace balance.
En Instagram o Snapchat abundan las cuentas “fisha” (de verlan “poster”). Creados para burlarse, cualquier persona puede generarlos y son accesibles para todos. Vídeos íntimos sin consentimiento, fotomontajes burlones… El contenido es siempre malicioso, afirma Lina, 16 años. “Una amiga fue acosada, pusieron videos de ella en la calle y desnuda en cuentas y todos la insultaban en las publicaciones”, denuncia la adolescente.
Una ola de ciberacoso que puede tener repercusiones en la vida real, como en el caso de Samara, atacada fuera de su colegio hace un mes y que ocupó la primera plana de la prensa.
Una pérdida de confianza
“Hay algunos que tienen miedo de ir a la escuela porque no saben quién recibió o vio la foto. Esto a veces lleva al acoso, luego surgen problemas escolares. Hay una pérdida de confianza en las personas. Hay muchas personas que se encuentran completamente indefensas ante estas situaciones y que claramente piensan en el suicidio, porque para ellos es la única salida”, se preocupa Lisa Raynaud, cofundadora de la asociación Stopfisha.
Su asociación apoya cada día a decenas de víctimas. Ofrece sesiones de escucha con psicólogos voluntarios pero también asistencia jurídica para conocer tus derechos y presentar una denuncia. Recordemos que el ciberacoso de carácter sexual se castiga con dos años de prisión y una multa de 30.000 euros.
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