lEl proyecto de ley de finanzas fue presentado el jueves 10 de octubre por el gobierno de Michel Barnier. En este proyecto, las comunidades tendrán que participar en un esfuerzo de 5.000 millones de euros con el objetivo de ahorrar 60.000 millones de euros en un año en total.
Más precisamente, el Estado se daría la posibilidad de hacerse con hasta el 2% de los ingresos reales de funcionamiento de las comunidades, siempre que sus gastos reales de funcionamiento superen los 40 millones de euros. Esto significa que los municipios más pequeños no se verían afectados.
Según los cálculos de Intercommunalités de France, esto afectaría a 420 comunidades. Así, el municipio de Lille será una de las 10 ciudades que más aportaría con 8.427.222 euros. Para París, el importe es de 154.309.872 euros.
Pero también estarían implicadas las ciudades medianas del Norte y del Paso de Calais, como Gravelines, Béthune, Lens, Douai o Boulogne-sur-Mer. Ciudades que tendrán que ahorrar en otros lugares o suspender las inversiones.
Si nos fijamos en las intercomunidades, la metrópolis europea de Lille se encuentra entre las tres mayores contribuyentes con 17.619.032 euros, por detrás de la Métropole d’Aix-Marseille-Provence (21.888.398 euros) y la Métropole de Lyon (49.965.634 euros).
También en este caso estarían implicadas las intercomunidades del Paso de Calais, como la de Béthune-Bruay, Artois-Lys Romane o el Pays de Saint-Omer.
Si, a nivel departamental, el Norte y el Paso de Calais no están afectados, la región de Altos de Francia podría verse gravada con 56 millones de euros, según cálculos de las Intercommunalités de France, lo que situaría a la región en tercera posición de las más recaudadas por detrás de Auvernia-Ródano-Alpes (64,5 millones de euros) e Île-de-France (81,3 millones de euros).
