¿Celebrará el hockey francófono un segundo título consecutivo de campeón suizo, 12 meses después de la histórica coronación de Genève-Servette? La respuesta llegará esta tarde, o la noche del martes al miércoles, al final del séptimo y último acto de la final del playoff entre Zúrich y Lausana.
Impresionante el sábado en casa en el partido nº 6, el LHC volvió a presionar a Zurich, gran favorito para suceder al Genève-Servette y ganador de sus dos primeras series en 4 partidos. Los hombres de Geoff Ward, de espaldas a la pared con 2-3 en la serie, ganaron 5-3 después de liderar 5-0 en el minuto 39.
El equipo receptor hasta ahora siempre ha impuesto su ley en esta final, y la “Z” incluso está invicta en su hielo desde el inicio de la serie. Pero su entrenador Marc Crawford debe afrontar vientos en contra: Yannick Weber, jefe de su defensa, y Rudolfs Balcers, extremo habitual del primer triplete ofensivo, están lesionados y son inciertos para este partido decisivo.
Un partido como ningún otro
Un partido número 7 no es un partido como cualquier otro. Los Zurich Lions vivieron una amarga experiencia en su última aparición en la final, en 2022: perdieron 3-1 en el hielo de Zug, mientras abrían el marcador tras sólo 62 segundos de juego.
La frustración de los zuriqueses, que habían ganado los 3 primeros partidos de la serie, no tuvo paralelo. Especialmente para Denis Malgin y Sven Andrighetto, que no participaron en la última coronación en 2018 y llegaron a Zúrich con la firme intención de triunfar en el campeonato.
La temporada pasada, el Zúrich fracasó claramente en las semifinales de los playoffs (4-0 para Bienne). La “Z” esta vez parece madura para conseguir su décimo título de campeonato. Pero el LHC, que ya ha desafiado los pronósticos al llegar a la final por primera vez en su historia y poner en duda al ogro de Zurich, tiene los medios para lograrlo.
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