lo esencial
El sábado 5 y domingo 6 de octubre en la sala de espectáculos, el tema de la Fiesta del Libro fue: la gula. Se nos hace agua la boca con las páginas y las animaciones.
La transición de la Feria del Libro a la Fiesta del Libro no es una sutileza del lenguaje. Es una realidad: más allá de la presencia de autores, intercambios y otras dedicatorias – figuras obligadas del género – el Festival, centrado desde hace varios años en los jóvenes y adolescentes, ofrece algo para “divertirse”, según el prefacio de Martine Souquet, que Se basa en “el papel catártico de purga de las pasiones” que Aristóteles atribuía a la lectura. Dicho de forma más sencilla: nos divertimos en la Fiesta del Libro. Todo está hecho para contribuir a ello con múltiples actividades adaptadas a todas las edades. Por ejemplo: tres escenografías para un capricho (el tema del año) impulsadas por Margaux Ollivier, Alma Kaiser (artista y diseñadora gráfica) y Hannah Magno (fotógrafa, pero no sólo). Una veintena de autores e ilustradores –algunos de muy lejos, lo que demuestra el atractivo del festival– esperan a las familias que se toman su tiempo antes de elegir y heredar una dedicatoria personalizada.
Abundante e impredecible
El festival también incluye exposiciones: “en el aire” donde Jon Von Hollebem, autor del cartel del evento, cruza el desierto a lomos de un perro, Filante de Marion Jamault donde nos sumergimos en la producción de un cortometraje, y Pop-up donde Philippe Ug, un experto en todos los oficios, trasciende los límites entre los géneros. El espectáculo “Le Chat d’Achille”, de la Compagnie Au Petit Théâtre des Ombres, se inspiró en la obra de Johan Leynaud, ganador del Premio del Libro Infantil. Los escolares de Gaillac pudieron verla en primicia y se lo pasaron genial (sábado 5 de octubre, 9:30 y 11 horas). Durante el festival, podrá pasear “en Fromagie” con Bernard Friot para una lectura-degustación (viernes 4 de octubre a las 20 h) o asistir a “Trente-six Chandelles”, una lectura performance de Marie-Sabine y Cécile Elma Roger (sábado de octubre 5 a las 11:30), vivir emociones fuertes con Tonnerre de Mammouth, una lectura participativa de cómic (sábado a las 18 h), participar en un concurso de lectura en voz alta (sábado a las 16 h); en una lectura de cómics (Alma Liberté el domingo a las 14:30) o en el Malle aux Histoires (sábado a las 16:30). La Mediateca de Gaillac va más allá de sus muros para ofrecer un rincón de lectura y de juegos, Gwendoline Soublin anuncia una Fiesta con motivo del décimo aniversario de Nono… Y para aquellos que quieran más, los talleres de animación proporcionan material para operar el cerebro: La batalla contada (sábado 14:30) lanza el desafío de la historia más bella acompañada de Nathalie Somers y David Bry, Philippe Ug (sábado 11:00) y Elena Selena (domingo 10:30) abrieron el insondable mundo del pop-Up. Los niños podrán realizar frescos (prehistoria, Ulises, Arcimboldo), improvisaciones de manga, ejercicios de lectura y escritura. La Fiesta del Libro es abundante e impredecible: éste es su encanto y la receta de su éxito.