La influencer Poupette Kenza, en prisión preventiva el pasado mes de julio en un caso de extorsión investigado en Rouen, fue puesta en libertad el jueves y puesta bajo supervisión judicial, según supo por su abogado.
“Esta detención fue realmente motivada por la falta de garantía de representación, debido a que ella tiene toda su vida en Dubai (…) sus hijos, su marido, su vivienda, sus cuentas bancarias, sus empresas”afirmó a la AFP Jérémy Kalfon, confirmando la información de Le Parisien.
“Desde el momento en que su vida fue reimportada a Francia, ya no había ningún motivo para que permaneciera detenida dada la moderada gravedad del caso”estimó.
La joven, de 24 años, está embarazada de su tercer hijo y este embarazo “muy probablemente permitido” que se examine su liberación “un poco más rápido” por la justicia, según Me Kalfon.
Poupette Kenza, cuyo verdadero nombre es Kenza Benchrif, fue acusada de intento de extorsión por parte de una banda organizada y asociación criminal.
El caso se desencadenó por la denuncia, el 23 de febrero de 2024, de una pareja que “es objeto de diversas vigilancias (físicas, instalación de una minicámara cerca de su domicilio y baliza GPS colocada en su vehículo) y fue amenazado físicamente con la condición de entregarle una suma de 200.000 euros”explicó el fiscal de Rouen el pasado mes de julio.
La pareja de la influencer, Allan Liehrmann, regresó a Francia el 23 de septiembre “explicarse ante la justicia”. Detenido en el aeropuerto, fue a su vez acusado de los mismos hechos y encarcelado.
La investigación permitió dar con el presunto autor del intento de extorsión, quien también fue procesado y encarcelado. El hombre fue detenido durante una reunión. “preveía la entrega de la suma de dinero, mientras portaba una granada”.
Admitió haber contactado a las víctimas para “resolver una disputa financiera entre ellos y un influencer que actualmente reside en Dubai”.