“Mona’s Eyes” de Thomas Schlesser: una mirada traviesa e inusual al arte

“Mona’s Eyes” de Thomas Schlesser: una mirada traviesa e inusual al arte
Descriptive text here
-

“Los ojos de Mona” de Thomas Shlesser se pueden descubrir en las ediciones Albin Michel.

“Los ojos de Mona”

Por Thomas Schlesser

Albin Michel

Publicación en febrero de 2024.

478 páginas

22,90€

Nuestra recomendación: 4/5

TEMA

Mira un cuadro. O más bien aprender a mirarla, meditar largamente ante una obra, sus formas, sus patrones, sus juegos de luces y luego, imperceptiblemente, dejar emerger esa primera sensación viva y difusa, que a veces llamamos: emoción estética. ..

Todos los miércoles, después del colegio, la pequeña Mona y su abuelo pasean por los pasillos de los museos parisinos para descubrir determinadas obras maestras. El tiempo se acaba porque Mona corre el riesgo de perder la vista. Por eso, para protegerse de la mala suerte, su abuelo le ofrece sus ejercicios de admiración: Leonardo da Vinci, Vermeer, Goya, Manet, Degas, Van Gogh, Magritte… Tantos himnos.a la belleza y la armonía del mundo.

Cada encuentro con un artista lleva a una lección de vida, un “precipitado moral y filosófico”. Y cada vez, este abuelo – tan sensible y refinado –habla al niño como a un adulto: “confía en tu cuerpo, en tus impresiones inmediatas, no intentes enmascararlas, la belleza captura”, dijo Cocteau y ves a Mona, una obra de arte a veces es inquietante…”

Con el tiempo, Mona lo absorbe todo, perfecciona sus conocimientos, el abuelo nota que ella tiene “el ojo absoluto”, como a veces decimos de un músico, que él tiene el oído absoluto. A través de estos paseos por el Louvre, por Orsay o por Beaubourg, estosDos seres una profunda complicidad sellada por un pacto secreto. No digas nada a los mayores de los que el Principito ya hablaba con recelo en su época. ¡Shh! Mamá y papá, atrapados en sus problemas cotidianos, imaginan que Mona va a un psiquiatra infantil que le está haciendo bien.

Pronto Mona pasará de la infancia a la niña: el burbujeo de la adolescencia, todo crepita, todo arde, el arte enciende la vida…

PUNTOS FUERTES

Un cuento moderno que revive en nosotros el arte (hugoliano) de ser Abuelo.

Una reflexión profunda y erudita sobre la manera de ver un cuadro, un lienzo, un paisaje, un rostro. “Son los espectadores quienes crean la imagen”, escribe Thomas Schlesser. Pero en ciertos pintores como Gainsborough (La conversación en un parque) a veces descubrimos un admonitor, ese personaje que mira al espectador y lo invita a entrar en el cuadro.

Una iniciación a la Belleza, pero también una invitación a redescubrir todos nuestros sentidos: Mona busca tocar la materia, acurrucarse en silencio en un rincón de una obra contemporánea. (Louise Bourgeois)

ALGUNAS RESERVAS

una hebrade fastidio (¿envidia?) ante tanta erudición, aunque el tema deThomas Schlesser nunca es pedante.

Un desenlace un tanto convencional, muy cinematográfico. Tras el (merecido) éxito internacional del libro, los productores de Hollywood deben estar en la línea de salida…

UNA PALABRA MÁS…

Cincuenta y dosSemanas para un viaje iniciático salpicado de profundas alegrías, angustias y tristezas. Y me vienen a la mente estas pocas líneas de Eugène Guillevic:

“Hay sacrificio,

No sabemos de quién

A menos que sea

Del que mira”.

UNA FRASE

“Henry se echó a reír. Y su risa la hizo reír a su vez. Fue allí, precisamente allí, donde hubiera querido hablarle del filósofo Alain y de lo que dijo en sus Observaciones sobre la felicidad. Alain afirmó que quien se esfuerza por ser feliz merece una medalla, una medalla cívica, porque su propia resolución de estar contento, satisfecho, a veces a costa de un ejercicio de voluntad un tanto fuerte, irradia sobre los demás”. (página 43)

EL AUTOR

Thomas Schlesser es profesor en la Polytechnique, historiador del arte y director de la Fundación Hartung-Bergman. Ha publicado numerosos ensayos y escrito guiones para películas y documentales.

Es autor de numerosas representaciones o banquetes festivos, como el del 200 aniversario de Courbet. Trabajó durante diez años escribiendo Los ojos de Mona, tomando a una niña de diez años como heroína…

-

NEXT Autor de dos libros a los 19 años, Louis Lefèvre utiliza las palabras para curar